La explotación minera en territorios con vocación agrícola en Colombia dependerá de lo que ocurra este domingo en Cajamarca, Tolima, pues allí los ciudadanos decidirán, mediante consulta popular, el futuro del proyecto aurífero La Colosa, uno de los más grandes del país y del mundo, con reservas estimadas en 28 millones de onzas de oro.
Según la Registraduría, un total de 16.312 ciudadanos están habilitados para sufragar en esta elección en tres puestos de votación donde se habilitarán 18 mesas en la localidad.
Pese a que los promotores del No a la minería exigían más puestos, la Registraduría respondió que el número de lugares para ejercer el derecho en la consulta será igual al de las elecciones atípicas de alcalde.
“Revisado el índice de participación en ejercicios similares en las últimas diez consultas populares desde 1998, el promedio de participación es del 32 %, cifra muy inferior al promedio en votaciones de cargos de elección popular. La estadística trae consigo la disminución del número de mesas a instalar, pero no habrá reducción en el número de puestos de votación. Siempre los puestos serán los mismos”, aseguró el registrador nacional Juan Carlos Galindo.
Añadió la entidad que con base en la experiencia en algunos mecanismos de participación ciudadana como el de Envigado, Antioquia, en el que se asignaron casi mil personas por mesa, sin que se afectara la jornada de votación, por lo tanto en Cajamarca se destinaron 980 personas por mesa de votación.
¿Qué se votará?
“¿Está usted de acuerdo Sí o No que en el municipio de Cajamarca se ejecuten proyectos y actividades mineras?”, esta es la pregunta que responderán los cajamarcunos el domingo.
De acuerdo con Jorge Rojas, secretario de Gobierno local, las autoridades garantizarán el derecho a decidir y será el Gobierno Nacional el que defina si el proyecto La Colosa, que ya cuenta con permisos para la exploración, finalmente se realiza.
Se estima que en el depósito de La Colosa hay unas 1.000 toneladas de oro que la empresa sudafricana AngloGold Ashanti quiere explotar luego de la obtención de la licencia ambiental. La explotación todavía no se ha hecho porque según la compañía, faltan al menos tres años para terminar los trabajos de exploración. Desde que se conoció el proyecto, a mediados de 2009, se levantó una controversia nacional por los impactos ambientales que tendría una obra de esta magnitud.
“El voto es muy importante para establecer qué es lo que quiere la gente. Pero hay unos derechos adquiridos de una empresa. El resultado del domingo se va a respetar y no sabemos qué va a pasar si gana el No en las urnas”, añadió Rojas.
Para qué las consultas
La consulta popular es un mecanismo de participación mediante el cual se convoca al pueblo para que decida acerca de algún aspecto de importancia. La consulta popular puede ser tanto nacional como departamental, municipal, distrital o local (artículo 297 de la Constitución).
Varios asuntos se han resuelto bajo este esquema. El más reciente fue el del municipio de Envigado, que decidió entrar al Área Metropolitana mediante este mecanismo.
De acuerdo con Andrés Felipe Bernal, docente de la Sergio Arboleda, este proceso, no es de poca monta, pues es la primera vez que este mecanismo de participación tiene origen ciudadano y viene cargado de una puja político-electoral en la que hace menos de un mes, en elecciones atípicas fue elegido el nuevo alcalde del municipio, en razón a que su antecesor había fallecido antes del año de gobierno.
“Esta es una oportunidad única para que por primera vez en Colombia haya un mandato popular que ponga en práctica lo enunciado en el artículo primero de la Constitución respecto al carácter descentralizado de sus entes territoriales. En últimas, de ganar el No, sería la primera victoria de las regiones frente al centralismo que ha reinado en los proyectos de desarrollo de los departamentos, y a su vez podría abrir las puertas a un sinnúmero de iniciativas similares a lo largo del país” .