Nuevas propiedades de Roberto de Jesús Escobar, conocido como el “Osito” y hermano del exnarcotraficante Pablo Escobar, fueron desalojadas y recuperadas por la Sociedad de Activos Especiales (SAE), entidad que ya ha hecho otros procedimientos similares con bienes de este hombre.
En este caso, de acuerdo con el reporte entregado por Amelia Pérez, presidenta de la SAE, la acción se llevó a Cabo en zona rural de Supía, en el departamento de Caldas. En concreto se trata de las dos propiedades ubicadas en la vereda El Obispo y conocidas con los nombres de Finca Trocadero y Finca Piedras, que entre las dos suman una extensión de más de 86 hectáreas y que sonaron mucho el año pasado cuando les aplicaron extinción de dominio.
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La presidenta recordó que estos bienes estaban ocupados de forma irregular por terceros, pero que ello no impidió que avanzaran con el procedimiento de desalojo. “Vamos a seguir luchando para evitar que los narcotraficantes sigan burlando la ley y disfruten de los bienes que adquirieron ilegalmente, y hoy, son del pueblo”, dijo.
Ambos predios estaban siendo ocupados por los terceros que menciona Pérez desde el 22 de mayo de 2024, específicamente por un hombre que se identificó como mayordomo y quien dijo a la SAE que tenía un contrato con quien sería el hijo de Roberto y sobrino de Pablo Escobar.
Desde ese día, sin embargo, las dos lujosas propiedades estaban en un proceso de extinción de dominio luego de que la Fiscalía materializara la diligencia de secuestro a las mismas.
De acuerdo con los datos de la SAE, ambas fincas tienen un valor estimado de más de $4.770 millones y, según investigaciones que se han adelantado, se pudo establecer que en ellas se realizaban frecuentes reuniones y fiestas de personas allegadas al fallecido narcotraficante.
En mayo de 2024, la Fiscalía informó que ambas fincas habrían sido obtenidas con dineros provenientes de actividades de transnacional de estupefacientes. “Durante las diligencias realizadas de manera conjunta con la Policía Nacional, se constató que las propiedades estaban conectadas entre sí, tenían árboles frutales, piscina y algunos lujos”, indicaron desde el ente investigador en su momento.
Desde 1990, la Fiscalía estableció que los predios eran propiedad del ‘Osito’, pero habrían sido registrados a nombre de familiares o empleados. Asimismo, informaron desde la Fiscalía, se acreditó que presuntamente las fincas se pagaron en su momento con recursos obtenidos de manera ilegal por Pablo Escobar.
Desde entonces, las dos propiedades ubicadas en Supía quedaron en manos del proceso de la SAE que culminó con su desalojo, tal como sucedió en marzo del año pasado con el museo que el hermano del excapo tenía en El Poblado y del que finalmente lo desalojaron en el tercer intento. La propiedad donde operaba dicho museo tiene un valor comercial de $12.000 millones y durante un par de décadas estuvo a nombre de varias personas, quienes serían testaferros de los Escobar Gaviria, todo con el fin de evadir los procesos legales que pudieran surtirse sobre la misma.
Sobre ese sitio en El Poblado, comuna 14 de Medellín, la SAE ya había informado que se hará la Casa Cultural de “La Otra Historia”, un espacio para la dignificación de las víctimas, donde se promueva la transformación del discurso hacia uno de resignificación y solidaridad.
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