Organizaciones animalistas del Oriente Antioqueño hicieron un llamado de alerta ante el incremento de animales arrollados en la autopista Medellín - Bogotá. Señalando que la situación es especialmente crítica en tramos como el que se localiza a la altura del municipio de El Santuario, desde esas organizaciones se instó a las autoridades de tránsito y a operadores como Devimed y el Invías para implementar medidas de fondo que permitan reducir la mortalidad para los animales.
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“Queremos manifestar nuestra preocupación por el alto índice de accidentalidad de animales en la autopista. Semanalmente, recibimos reportes de perritos que son víctimas de atropellamientos en los que la gran mayoría de veces son abandonados a su suerte”, se denunció desde la red de Voluntarios por los animales El Santuario.
De acuerdo con esa organización, durante las últimas semanas son múltiples los perros que han tenido que ser atendidos luego de ser embestidos por vehículos que se desplazan por esa autopista, que a raíz de la gravedad de sus heridas han tenido que ser sometidos a complejas cirugías y procesos de recuperación largos.
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A pesar de los esfuerzos, los animalistas señalaron que la mayoría de animales intervenidos quedan con graves secuelas en su movilidad o simplemente terminan falleciendo por la complejidad de sus heridas.
A manera de agravante, dicha red de voluntarios reprochó que gran parte de los conductores infractores se fugan del lugar de los hechos y dejan los animales abandonados a su suerte.
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Pese a que la autopista está dispuesta para que los automotores se desplacen a alta velocidad, los animalistas consideraron urgente que tanto la concesión como el Invías comiencen a implementar medidas para la reducción de velocidad, buscando no solo proteger a los perros, sino a muchas otras especies de fauna silvestre que deambulan por la zona.
“Con una profunda preocupación invitamos a Devimed y el Invías para que conversemos sobre esta situación de este punto crítico que se presenta en el tramo cerca a la entrada de El Santuario y las veredas cercanas por dónde deambulan no solamente fauna doméstica, callejera y silvestre”, señaló la red, recordando que en esos puntos críticos también están en riesgo personas mayores y niños que deben desplazarse por las orillas para ir a estudiar.
“Estos reductores de velocidad serían además una medida efectiva para reducir accidentes, lesiones, pérdidas de vidas y también una muestra de compromiso, responsabilidad y adicional crean conciencia, pues nuestras acciones al volante generan un impacto en la seguridad vial de los demás”, añadieron en un comunicado.
