A cuatro meses y siete días para concluir el periodo de la actual administración departamental, el proyecto del parque de deportes a motor, también llamado “Central Park”, afronta una contrarreloj a la que se le agota el tiempo.
A los problemas legales ya conocidos, que van desde el cambio en la destinación original del lote como parque ambiental y el proceso jurídico con un polígono cerca a la vía a Machado que había sido ocupado por unos particulares y que fue objeto de medidas cautelares, se suma un nuevo hallazgo de la Personería que reveló un documento que probaría que Bello no cedió al Departamento su parte del Tulio Ospina.
Además, la primera convocatoria para elegir constructor fue declarada desierta el pasado 5 de agosto porque ninguna de las cinco empresas inscritas en el catálogo de contratistas que fueron invitadas presentó propuesta formal por la etapa 1 del proyecto.
Esa primera fase contempla todo el movimiento de tierra y pavimentación para darle forma a la estructura de la pista del autódromo y las obras complementarias, que van desde zonas verdes hasta redes de servicios públicos para un escenario de talla mundial que fue avalado por la Federación Internacional de Automovilismo.
Lo que viene
El segundo proceso de invitación privada realizado por la Empresa de Vivienda e Infraestructura de Antioquia (Viva) para elegir al contratista de las obras del autódromo está en su recta final. Según el cronograma, la elección se haría el lunes y un día después se legalizaría el contrato. El acta de inicio se firmaría el jueves 29 de agosto.
El presupuesto del contrato fue modificado, atendiendo las observaciones de dos empresas, y se le añadieron 2.454 millones de pesos a la propuesta, es decir, que construir la primera fase del autódromo rondaría los $54.490 millones.
La expectativa de que las obras comiencen de una vez por todas contrasta con el reciente informe realizado por la Personería de Bello, en el que se evidencia que los líos jurídicos con los que carga el proyecto aún no se resuelven.
Una de las conclusiones tiene que ver con que desde el 2014, Bello le había manifestado al Departamento su intención de aceptar el porcentaje que le correspondía del lote Tulio Ospina y que, en palabras de la Personería, esa “manifestación bastaba para que el Municipio adquiriera los derechos reales sobre el bien”.
En ese documento, Carlos Muñoz, alcalde de la época, le responde a María Eugenia Escobar, secretaria de Hacienda de Antioquia para ese entonces, sobre la intención de Bello de quedarse con el 12 % de las 97 hectáreas, avaluado en $38.000 millones.
En concepto de la Personería, de continuar el proyecto el Municipio de Bello se expone “a un detrimento patrimonial de grandes proporciones”, tanto por la desidia de la actual administración de reclamar la parte del lote que le corresponde como por la decisión de la Gobernación de Antioquia de seguir con la obra, en contravía de las alertas de la Contraloría y la Personería .
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días faltan para que termine el gobierno de Luis Pérez y “Central Park” aún no inicia.