La Diócesis de Sonsón Rionegro se pronunció este martes sobre la crisis de seguridad que aqueja a varios municipios del oriente antioqueño, calificando como ineficaces las medidas del gobierno nacional y regional para manejar la situación.
A través de un comunicado de prensa, que aparece firmado por el obispo Fidel León Cadavid Marín, ese ente de la Iglesia Católica expresó su preocupación por los problemas de orden público que se han presentado principalmente en municipios como Nariño y Argelia, en donde la confrontación entre varios grupos armados vienen sembrando zozobra entre la población civil.
“La situación de orden público es preocupante ante la llegada de estas estructuras criminales que se hacen cada vez más fuertes en nuestra subregión, por el control de fronteras territoriales y el microtráfico. La falta de acciones contundentes y respuestas eficaces por parte del gobierno regional y del orden nacional, al actuar violento de los grupos presentes en el Oriente Antioqueño, han generado zozobra y desconfianza hacia las instituciones y una gran sensación de crisis de gobernabilidad”, criticó la diócesis en su pronunciamiento.
Con base en ese diagnóstico, el ente hizo un llamado por doble vía.
Instó a los grupos al margen de la ley a respetar la vida y cesar las hostilidades contra la población civil, también pidió a las entidades del Estado incrementar sus esfuerzos en resolver ese drama.
“(...) Instamos a las autoridades de orden local, regional y nacional a la búsqueda urgente de soluciones efectivas para contrarrestar, de manera definitiva y no paliativa, las afectaciones por parte de los actores armados ilegales que operan en el oriente Antioqueño”, expresó la diócesis.
“La vía para conquistar la paz no es otra que la del respeto por la vida y la integridad del ser humano”, agregó la carta, que también fue firmada por el rector de la Universidad Católica de Oriente, Pbro. Elkin de Jesús Navárez Gómez; el gerente de la organización Coredi, Pbro. Pedro Pablo Ospina Osorio; el director de la Corporación Vida, Justicia y Paz, Pbro. Fabián Humberto Silva Zuluaga; y el director ejecutivo de la Corporación Prodepaz, Pbro. Oscar David Maya Montoya.
Tal como lo registró El Colombiano en febrero de este año, los municipios antioqueños de Argelia y Nariño han vivido recientemente días de zozobra por cuenta del accionar de varios grupos armados.
Durante el pasado fin de semana (11 y 12 de febrero), cerca de 17.514 habitantes estuvieron confinados en sus casas hasta 68 horas luego de que, a través de WhatsApp, un mensaje de un grupo armado, identificado como el Clan Oriente, amanezara con emprender represalias contra cualquiera que saliera a la calle.
A raíz de esa incertidumbre, 23 alcaldes del Oriente antioqueño firmaron también un pronunciamiento conjunto, dirigido al ministro de Defensa Iván Velásquez, advirtiendo que el año pasado se registraron 190 homicidios en ese territorio y en lo corrido de 2023 ese saldo asciende a 20.
De acuerdo con los informes de las autoridades, en la zona hacen presencia agrupaciones como el Clan del Golfo, el Eln, disidencias de las Farc y otros grupos.