x

Pico y Placa Medellín

viernes

0 y 6 

0 y 6

Pico y Placa Medellín

jueves

1 y 7 

1 y 7

Pico y Placa Medellín

miercoles

5 y 9 

5 y 9

Pico y Placa Medellín

martes

2 y 8  

2 y 8

Pico y Placa Medellín

domingo

no

no

Pico y Placa Medellín

sabado

no

no

Pico y Placa Medellín

lunes

3 y 4  

3 y 4

language COL arrow_drop_down

¿Qué es la ortorexia? El trastorno en el que comer saludable se convierte en obsesión

Este trastorno es poco conocido, sin embargo, por las tendencias hacia la vida fitness ha aumentado en el mundo.

  • Estas personas prefieren alimentos orgánicos, cultivados sin agroquímicos y evitando los que tienen grasas y carbohidratos. FOTO: Getty
    Estas personas prefieren alimentos orgánicos, cultivados sin agroquímicos y evitando los que tienen grasas y carbohidratos. FOTO: Getty
07 de junio de 2023
bookmark

Todo en exceso es peligroso. El estilo de vida fitness que se promueve en las redes sociales ha creado un fenómeno de personas que buscan aprender a alimentarse de manera saludable y equilibrada con propósitos como el de adelgazar o controlar alguna enfermedad como la diabetes, obesidad, hipertensión y demás. Lo que se hace necesario porque según la Organización Mundial de la Salud (OMS) hasta el 2016 había más de 340 millones de niños y adolescentes de 5 a 19 años con sobrepeso u obesidad.

Todos los días algunos influenciadores promueven estos estilos de vida sanos en redes sociales y aunque estos hábitos benefician la salud humana, no hay duda de que en exceso las buenas conductas pueden también ser peligrosas.

En ese proceso de aprender a comer mejor y tener buenas prácticas, se pueden desarrollar trastornos de conducta alimentaria (TCA) como la ortorexia. Se trata de las personas que tienen una obsesión patológica por comer saludablemente y eliminan de su dieta otro tipo de alimentos que cuentan con grasas y carbohidratos. Además, se preocupan en exceso por la calidad de los alimentos y su procedencia.

“Estas personas suelen desarrollar temores irracionales vinculados con los efectos de la alimentación. Por ejemplo, miedo a consumir alimentos que contengan grasas porque estos más adelante pueden desencadenar enfermedades e incluso la muerte o consumir alimentos que contengan azúcar o carbohidratos y que estos puedan ‘engordarlos’ excesivamente”, explicó Juliana Zuluaga Molina, nutricionista dietista del CES y con posgrado en Ciencias de la Nutrición de la Universidad de Standford.

La ortorexia es un trastorno poco común en países del tercer mundo, sin embargo, por la acogida que ha tenido la vida fitness en las redes sociales ha aumentado la obsesión por una vida sana: la OMS anunció en 2019 que el 28 % de la población occidental tiene ortorexia y según la Asociación de Bulimia y Anorexia de A Coruña (Abac), esta tendencia podría aumentar.

La nutricionista Juliana Ramirez explicó que la ortorexia es un trastorno alimenticio del que hay poca información a diferencia de otros como la anorexia o la bulimia. En Colombia no es frecuente que las personas consulten por síntomas relacionados al trastorno, sin embargo, sí se está haciendo más visible por las nuevas dinámicas.

“Existe evidencia que señala que el uso de redes sociales aumenta el riesgo de aparición de síntomas de ortorexia. Actualmente hay mucho intrusismo sobre la nutrición y la mayoría de recomendaciones nutricionales están basadas en la experiencia y no en la ciencia. El escaso control de procesos normativos y científicos en las redes genera la desinformación que abruma a los individuos”, agregó la nutricionista dietista Zuluaga Molina.

Jorge Orrego, nutricionista dietista del CES, quien se ha formado en trastornos de la conducta alimentaria, expresó que los pacientes ortoréxicos “tienen un menú en lugar de una vida”, ya que aquello que comen se convierte en una preocupación. Los principales causales de ésta son los patrones estéticos del cuerpo y tendencias alimentarias saludables”.

Lo que comen y lo que no

Las personas con ortorexia, según Orrego, prefieren alimentos orgánicos, cultivados sin agroquímicos, rechazando el consumo de los que tengan aditivos como estabilizantes, conservantes, potenciadores del sabor; alimentos procesados con alto porcentaje de grasas y carbohidratos y sin hacer diferenciación en la calidad de los mismos componentes, aunque también se necesiten y sean esenciales para una alimentación equilibrada.

Juliana Zuluaga Molina agregó que sus dietas se basan en verduras, frutas, frutos secos, semillas y alimentos que han sido vendidos como saludables “libres de gluten” y “keto”. “Cada vez la alimentación se vuelve más estricta con el tiempo, aumentan las restricciones y se van reduciendo la lista de alimentos permitidos, lo que puede desencadenar afectaciones en el estado nutricional, deficiencias de micronutrientes, anemia y alteraciones digestivas”.

Es decir, que coman este tipo de alimentos y dejen por fuera otros que tengan componentes como las grasas y los carbohidratos, no es tan saludable como ellos creen. Sin embargo, se obsesionan con la idea de restringir la mayoría de alimentos que no sean estos aunque sean necesarios para el cuerpo.

Los nutricionistas dietistas concuerdan en que más que una alimentación sana en la que se restrinjan algunos alimentos, se requiere de una alimentación equilibrada, balanceada. “Cuando se habla de una alimentación saludable no solo nos referimos a lo establecido en la tabla nutricional del producto, por el contrario la calidad nutricional del alimento está determinada más por los ingredientes que lo componen”, expresó Orrego.

Las personas con este trastorno entran en una espiral obsesiva que en vez de mejorar su salud trae aislamiento social —en este contexto cultural en el que las personas se reúnen constantemente para comer—, sentimientos de insatisfacción y estados de malnutrición. También se preocupan por perder el control sobre su vida al no llevar al pie de la letra la dieta, no sentirse conformes con su imagen corporal y no encajar en la sociedad.

Según la Mayo Clínic los trastornos de alimentación se diagnostican con exámenes físicos, una evaluación de salud mental por un profesional y estudios relacionados a los problemas alimenticios que tiene la persona. Es un diagnóstico especializado. Sin embargo, hay unos síntomas más específicos para la ortorexia que se han estandarizado.

“Los síntomas se caracterizan por la planificación estricta y obsesiva de comidas, la compra precisa y rigurosa de alimentos —revisando etiquetado nutricional e ingredientes de cada producto—, catalogándolos como buenos o malos, la eliminación drástica de grupos de alimentos, evitar eventos sociales porque no se puede tener control sobre los ingredientes, porciones y métodos de cocción utilizados, culpabilidad al desviarse del plan y finalmente, la preparación de comidas “saludables” con extrema rigidez de acuerdo a estándares autoimpuestos.

Si le dedica más de tres horas al día a pensar en la dieta y su planificación y/o preparación excesiva de las próximas comidas, debe consultar con un psicólogo o nutricionista que le ayudará a tener una mejor relación con la comida. Según Orrego, también aparecen sentimientos de culpabilidad si se infringe alguna de las premisas de su “dieta sana”, mientras que sienten satisfacción y placer al ver cumplidas sus expectativas.

Las preocupaciones

Las personas con ortorexia pueden experimentar pérdidas importantes de peso que ponen en riesgo su salud, anemias, hipervitaminosis (presencia excesiva de una vitamina en el organismo) o hipovitaminosis (carencia de una o varias vitaminas esenciales) según el caso, falta de determinados oligoelementos, que son indispensables para el desarrollo del metabolismo y en casos más extremos puede desarrollar trastornos obsesivo-compulsivo, depresión, ansiedad, ataques de ira o agresividad e hipocondriasis (obsesión con la idea de tener una enfermedad grave no diagnosticada).

La presión por tener estilos de vida saludables y trastornos como la ortorexia también pueden desencadenar otros trastornos como la vigorexia que es la obsesión por tener mejor su estado físico, similar a comer bien, pero en todo tipo de conductas que lo lleven a mejorar su cuerpo como hacer ejercicio.

Lea más: Ayuno intermitente: beneficios y riesgos para la salud

Por ejemplo, los deportistas pueden ser más propensos a desencadenar este tipo de conductas, ya que están cercanos a las exigencias físicas y a llevar su cuerpo al límite.

“El deseo de conseguir la perfección en el alto rendimiento y cumplir con las expectativas, lleva a los deportistas a preocuparse en exceso por la alimentación y se acaban utilizando métodos que conducen a dietas inapropiadas, conductas desordenadas, es decir, a una mala relación con la comida, lo que les lleva a desarrollar trastornos alimentarios clínicos, afectando el rendimiento deportivo y provocando alteraciones emocionales”, dijo la psicóloga deportiva María Cabrera Bolufer para el artículo Ortorexia, vigorexia y otros peligros de cruzar los límites de la vida sana publicado en 2022 por National Geographic.

El empleo que buscas
está a un clic
Las más leídas

Te recomendamos

Utilidad para la vida

Regístrate al newsletter

PROCESANDO TU SOLICITUD