El dueño de Twitter, Elon Musk, confirmó que a partir del próximo 20 de abril serán retiradas las insignias azules de las cuentas que fueron verificadas con el proceso antiguo y estarán reservadas solo para quienes paguen el nuevo servicio premium llamado Twitter Blue.
La red social había anunciado que el 1 de abril comenzaría a retirar las insignias azules heredadas, de tal forma que los usuarios individuales que quieran mantenerla debían acceder a la suscripción y las organizaciones y empresas, a otra dirigida a ellas, conocida como ‘Organizaciones verificadas’.
Sin embargo, muchas han sido las cuentas que desde principios de este mes han mantenido la insignia azul sin haber pagado una suscripción.
Las insignias azules heredadas se obtuvieron mediante el procedimiento antiguo y gratuito que solo exigía al usuario interesado solicitar la verificación y cumplir una serie de requisitos. Su finalidad era evitar las suplantaciones, respaldando que el usuario o la organización que la gestionaba era quien decía ser y que además, se trataba de un actor notable para el debate público.
Este sistema nunca convenció a Musk, quien siempre fue crítico con la política que concedía o retiraba la mencionada insignia. Por ello, con su nuevo papel como dueño de la red social, incorporó la insignia azul en la suscripción Twitter Blue, para que quien quisiera tenerla solo tuviera que pagar por ella, aunque también debía cumplir unos requisitos.
Junto a esta decisión, introdujo también distintos colores para la insignia, dejando el color azul para las cuentas de usuarios individuales, el gris para las institucionales y la amarilla para el resto de organizaciones y empresas. Estas últimas, además, cuentan con sus propia suscripción, en la que pueden vincular cuentas a su perfil para que aparezcan asociadas.
Musk reconoció “muchos errores” tras la compra de Twitter
El multimillonario aseguró este miércoles en una entrevista a la BBC que la gestión de Twitter había sido como una “montaña rusa” y admitió que se produjeron “muchos errores”, seis meses después de haber adquirido la red social.
Musk, que pagó 44.000 millones de dólares por Twitter, también afirmó que iba a cambiar la etiqueta de la BBC en la plataforma, después de que la cadena británica se quejara de haber recibido el sello de “medio financiado por el gobierno”.
En este diálogo, dijo: “Queremos ser lo más honestos y precisos posible. Estamos adaptando la etiqueta (de la BBC) a ‘financiada por fondos públicos’”, aseguró el magnate”.
Musk también habló de los primeros meses al frente de la red social, desde que la adquirió en octubre. “¿Ha habido muchos errores en este camino? Por supuesto”, afirmó. “Pero todo acabó bien. Tengo la impresión de que estamos en la buena dirección”.
Entre otras cosas, el también dueño de Tesla y SpaceX dijo que los anunciantes estaban volviendo a la red social, “cerca del nivel de rentabilidad”.
Estos comentarios tienen lugar días después de que Twitter privara al New York Times de la certificación oficial de su cuenta. Musk acusó al prestigioso diario, más bien progresista, de “propaganda”.