Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6
Empresas Públicas de Medellín es mucho más que una empresa local. Es un activo estructural para Colombia, pieza clave del sistema energético nacional y un referente histórico de gestión pública empresarial. Lo que ocurre en EPM no se queda en Medellín: tiene repercusiones sobre la estabilidad energética, la inversión pública y la confianza institucional en Colombia. Cuidarla es una responsabilidad colectiva, porque su bienestar es también el bienestar de millones de colombianos.
Hoy estamos frente a una situación crítica que requiere atención y sentido de país. Los intentos de debilitamiento institucional, las presiones políticas indebidas, las señales de intervención centralista y, especialmente, el incumplimiento por parte del Gobierno Nacional de las obligaciones financieras que tiene con EPM, son hechos profundamente preocupantes. No se trata de una disputa territorial. Se trata de un riesgo nacional. Colombia debe estar alerta.
Luego de que un juez ordenara embargar cuentas del Gobierno Nacional por las deudas que mantiene con la Empresa, la respuesta no fue el pago de lo adeudado, sino una orden de inspección por parte del Ministerio de Minas y Energía. Se puede estar o no de acuerdo con la decisión judicial, pero convertir a EPM en un blanco de retaliaciones políticas es inadmisible.
El no pago de los subsidios y transferencias que el Estado debe asumir pone en riesgo el flujo de caja, la planeación financiera y la capacidad de inversión de la Compañía. Ojo Colombia: sus servicios llegan a 9 millones de personas dentro y fuera del país, y sus resultados financieros impactan directamente el desarrollo de la ciudad. En el 2024, EPM generó excedentes por 1,7 billones de pesos para el Distrito, lo que ha representado, en promedio, el 22% del total de los ingresos de Medellín en los últimos 16 años. EPM es fuente de riqueza y desarrollo.
Las cifras demuestran la solidez de esta empresa 100% pública. EPM es la mejor calificada del sector de energía, agua y gas en Colombia, según el ranking Merco Empresas 2024. También es la entidad del conglomerado público con mejor favorabilidad, creció 10 puntos porcentuales en el último año (84%). Solo en el tercer trimestre de 2024, el Grupo EPM generó valor con el aporte de 14,7 billones de pesos (un 17 % más comparado con 2023) en el pago de impuestos, tasas y contribuciones del orden nacional, distrital y municipal, y obligaciones ambientales, entre otros rubros.
EPM no es una simple empresa estatal ni una fuente inagotable de recursos. Durante décadas, EPM ha demostrado que es posible combinar eficiencia, rentabilidad y gestión pública. Su solidez financiera se ha construido con rigor técnico, inversión y el compromiso de miles de trabajadores que, día a día, garantizan el acceso a servicios públicos esenciales. En medio de la crisis energética que enfrenta el país, EPM aporta el 17% de la energía nacional con Hidroituango.
Ninguna empresa puede sostenerse bajo un modelo de incertidumbre financiera ni de captura política. EPM requiere autonomía, estabilidad y reglas claras. Su fortaleza no puede verse comprometida por tensiones ideológicas ni por decisiones que desprecian su carácter técnico. Atacar a EPM golpea la confianza en el modelo público y empresarial colombiano.
Colombia debe cuidar a EPM. Orgullo institucional y columna vertebral del desarrollo del país.
*Presidenta Ejecutiva Proantioquia
