Si algo está claro para el sector energético en Colombia es que el país necesita de forma urgente activar más exploración de gas. Esa es la petición puntual de la Asociación Colombiana de Petróleo y Gas (ACP) al Gobierno de Gustavo Petro. La alerta es porque las reservas de este combustible se han reducido casi a la mitad en los últimos 15 años y, por ende, podría haber un déficit entre unos 4 y 6 años.
En un informe que expuso el tema, el gremio solicitó al Gobierno Nacional acelerar la exploración y agilizar los procesos de licenciamiento ambiental para el sector. Una petición del gremio al Ejecutivo es que aclare el papel del gas en la transición energética que adelanta.
La ACP expuso que actualmente hay 18 proyectos privados que producen 250 millones de pies cúbicos al día de gas natural. Esto garantiza el suministro, pero a corto plazo, es decir, hasta 2028.
Lo que tiene al sector con los pelos de punta obedece a que cada vez hay menos exploración, de hecho, el año pasado se perforaron 42 pozos, lo que significó una caída de 38% frente al registro de 2022. Hay que tener en cuenta que, solo 15 se destinaron a la búsqueda de gas, pero solo cuatro cumplieron la tarea.
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El presidente de la ACP, Frank Pearl, insistió en que mejorar estas cifras es fundamental para la economía colombiana y advirtió que si no se siguen buscando pozos, se podría generar una caída aún más crítica en las reservas de gas, ya que en su concepto aumentará la demanda en los próximos años.
“Ante este escenario, la exploración es prioritaria para reponer reservas y mantener niveles suficientes de producción. Para evitar el déficit, resulta necesario trabajar de forma articulada entre Gobierno, comunidades e industria con miras a desarrollar estos recursos energéticos y respaldar las transformaciones que requiere el país”, anotó ACP en su informe.
Según el documento hay, por lo menos, tres elementos puntuales que han jalonado la caída en la exploración. Uno de estos es la firma de menos contratos. Los acuerdos anteriores ya se están ejecutando, pero en los últimos años no hay nuevos.
No se niega la importancia del cuidado del medioambiente, pero una queja constante de los gremios obedece a que cada vez es mayor el papeleo y la demora para brindar los permisos y las licencias ambientales.
Asimismo, la incertidumbre en el mercado es evidente, así como la caída en la inversión extranjera directa. Según el documento las señales para el sector del gas están desincentivando la inversión y, por ende, la exploración.
Lo cierto es que el llamado de atención del sector es claro y con tiempo, lo que permite un margen de maniobra para atender la situación.
