La divisa inició el jueves en $4.390, ubicándose $40,4 abajo de la Tasa Representativa del Mercado, que estaba en $4.430,40.
El dólar arrancó la jornada de este jueves a la baja, mientras los mercados siguen atentos al posible regreso de Trump a la Casa Blanca y su impacto en las tasas de interés de la Reserva Federal.
La divisa inició el jueves en $4.390, ubicándose $40,4 abajo de la Tasa Representativa del Mercado, que estaba en $4.430,40. Además, tocó un máximo de $4.398, mientras que el mínimo fue de $4.387. Se registraron 40 transacciones por US$15,5 millones.
Según Bloomberg, el dólar retrocedió 0,3% después de su mejor día desde 2022. Los rendimientos de los bonos del Tesoro bajaron después de una ola de ventas sísmica el miércoles.
Los mercados se tomaron un respiro el jueves después de lidiar con los efectos de largo alcance de la presidencia de Trump. Su victoria obligó a los inversionistas a aceptar políticas económicas que podrían llevar a menos recortes de tasas por parte de la Reserva Federal, junto con una posible victoria arrasadora de los republicanos en el Congreso que podría ayudar a impulsar la expansión fiscal.
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“Lo que vimos ayer fue el manual de estrategias de Trump en acción, pero pronto va a evolucionar”, dijo Arnaud Girod, director de economía y estrategia de activos cruzados en Kepler Cheuvreux en París. “Los rendimientos estadounidenses no pueden seguir subiendo con las acciones estadounidenses en alza; estoy convencido de que los rendimientos se calmarán”.
Hoy más tarde, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, se enfrentará a una dura prueba, ya que el segundo mandato de Trump genera preocupaciones sobre la inflación. Se espera que los funcionarios bajen las tasas en 25 puntos básicos, una medida que se producirá inmediatamente después del recorte de medio punto en septiembre.
El crudo operaba estable el jueves, según Reuters, tras una liquidación provocada por las elecciones presidenciales en Estados Unidos, con un dólar más fuerte y menores importaciones petroleras en China equilibrando los riesgos de suministro de una presidencia de Donald Trump y los recortes de producción causados por el huracán Rafael.
