Una nueva pulla soltó el presidente Gustavo Petro contra su predecesor Iván Duque. En esta ocasión el actual mandatario aseguró en su cuenta de X (antes Twitter) que recibió las finanzas de Colombia con “deudas escondidas” y aseguró que su gestión las ha recuperado; sin embargo, el anterior gobierno se defendió y sostuvo que hay graves desafíos en la economía que deben ser atendidos con urgencia.
Petro se levantó, como de costumbre, a trinar en la mañana de este Viernes Santo. En esta ocasión el mandatario cuestionó las condiciones fiscales en las que recibió el Gobierno. “Recibimos un país con una realidad presupuestal manejada a las patadas con cerca de $100 billones de deudas escondidas y empeñado”, señaló el presidente.
Añadió que en su concepto el erario estaba dedicado exclusivamente a los grandes negocios del cartel nacional de la contratación en carreteras, en salud y en energía eléctrica.
El mandatario sugirió que su gestión enderezó el manejo fiscal del país y citó un reciente informe del Fondo Monetario Internacional (FMI). “Hemos navegado en la tormenta fiscal y vamos adelante”, insistió.
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El presidente se refiere a las conclusiones de la consulta del Artículo IV de Colombia que dio a conocer recientemente el Directorio Ejecutivo del FMI.
Y es cierto que dicho documento habla de elementos positivos. De hecho, el Banco de la República destacó que el informe reconoce que “el marco de política macroeconómica del país continúa siendo muy sólido y orientado a corregir los desequilibrios internos y externos acumulados durante 2021 y 2022”.
El FMI indicó que las políticas macroeconómicas restrictivas que se adoptaron en los últimos años en Colombia encaminaron a la economía por una senda más sostenible. “Este proceso se ha caracterizado por una reducción significativa de la inflación, una desaceleración de la demanda interna y una corrección del déficit externo”, dicen las conclusiones.
La respuesta
Claramente, no todo es color de rosa en el actual periodo y el anterior gobierno le contestó a Petro que hay serias advertencias en el mismo documento. Esa tarea la hizo José Manuel Restrepo, exministro de Hacienda de Iván Duque, quien respondió en la misma red social.
Lo primero que defendió Restrepo fue que las buenas finanzas comenzaron en el Gobierno Duque. Explicó que el informe destaca un apropiado manejo macroeconómico en los últimos tres años. Y dijo que eso mejoró significativamente los balances fiscales y de cuenta corriente.
Añadió: “El informe destaca la resiliencia del mercado laboral que ha mostrado mejoramientos importantes en 2023 y 2022, aunque con cierta debilidad al final del 2023”.
El exministro le pidió al mandatario enviar mensajes de confianza para sembrar certidumbre en los mercados, pues en su concepto la caída de la inversión privada y la productividad obedecen a la incertidumbre política local.
Y es cierto que hay un llamado de atención sobre asuntos internos. La entidad internacional señala riesgos asociados al fenómeno de El Niño, que podría traer impactos más fuertes de lo esperado. Y también una demanda privada más débil, una calibración no adecuada de las políticas macroeconómicas y la incertidumbre en torno a las reformas.
Restrepo le recordó al presidente que el plan fiscal para 2024 plantea riesgos si se incumple la regla fiscal. Razón por la que el FMI propone una reducción del gasto para disminuir los costos de financiamiento y evitar un aumento de la inflación.
Y eso no fue todo. Restrepo se refirió sobre una de las principales banderas del Gobierno. “Hay que ordenar de manera más responsable la transición energética”, comentó.
Hay que recordar que el FMI también habló sobre la intensificación de las tensiones geopolíticas, el endurecimiento de las condiciones financieras internacionales y perturbaciones de las cadenas de suministro, que resultarían un desafío más para la economía local.
“Todos estos factores podrían afectar negativamente al crecimiento y provocar un aumento de la inflación en Colombia. Sin embargo, el directorio ejecutivo del FMI reconoce que las sólidas políticas y marcos institucionales del país continúan respaldando la resiliencia de la economía y su capacidad para responder a perturbaciones económicas”, anotó Banrep sobre las conclusiones del FMI.
En otras palabras, sí hay avances, pero no para cruzarse de brazos, pues es evidente que el mundo atraviesa por situaciones difíciles y se necesita cabeza fría y mesura para dirigir la política monetaria y la economía nacional.
