Térmicas, al máximo
El mecanismo supone, por ejemplo, que el Centro Nacional de Despacho (CND) defina cuánta energía debe almacenarse y en qué embalses, seleccionando las plantas hidroeléctricas más eficientes y económicas para optimizar el uso de los recursos hídricos.
Además, el MinEnergía y la Creg detallan cómo ante la insuficiencia de la generación hidroeléctrica para satisfacer la demanda, las térmicas y las renovables deben aparecer para mantener cubierto el suministro.
El Ministerio y sus entidades adscritas deben mantener un monitoreo constante de la situación, “ajustando las medidas de acuerdo con la evolución de los niveles de los embalses, las condiciones climáticas y la demanda energética”.
Entre otros aspectos, la cantidad máxima a embalsar se revisará semanalmente, mientras las exportaciones de energía se restringirán a los excedentes de las térmicas.
Con todo esto, el ministro Camacho indicó que el mecanismo garantiza que se tomen acciones anticipadas “para gestionar eficientemente los recursos energéticos del país”. También confirmó la mayor generación de las térmicas –para las cuales habrá una meta diaria– y expresó que esto permitiría recuperar los embalses.
Viene época de más consumo
De acuerdo con Javier Bustos, director de Observadores Colombia, actualmente las térmicas están funcionando a un 66% de su capacidad, pero el nivel ideal sería un 90% o hasta 100% debido a la coyuntura, es decir, poniendo 120 gigas diarias.
Advirtió que a pesar de estas medidas, la recuperación de los embalses depende de las lluvias en las cuencas hidrográficas, y a su juicio el protocolo que activó el Gobierno llega tarde porque debió hacerse cuando el nivel estaba en el 55% y no esperar a que llegara a 49%.
Según el experto, en días como el martes pasado se observaron comportamientos atípicos de los consumidores, como un incremento en la demanda entre las 2 y 3 de la tarde que estaría explicado por las altas temperaturas.
Bustos recordó que con la llegada del último trimestre se aumentará el consumo, debido a que la industria o el comercio operan a máxima capacidad para atender la demanda de diciembre y los hogares demandan más por las luces y adornos navideños.
Por su parte, el exministro de Minas y Energía, Amylkar Acosta, ha hablado de un estrés hídrico en el país que está presionando los precios de la energía en bolsa, llevándolos hasta $932,5 kilovatio-hora.
Acosta evocó las palabras que la presidenta de Acolgen, Natalia Gutiérrez, dijo hace unas semanas a El Tiempo: “la solución a la crítica situación energética que enfrenta el país no da más espera. El desabastecimiento de energía eléctrica está a la vuelta de la esquina, por lo que se acabó el tiempo para tomar decisiones que erradiquen, de una vez por todas, el riesgo de un apagón”.
En cuanto a los embalses, el exministro llamó la atención sobre el que sirve a la hidroeléctrica de El Peñol, “que ha alcanzado un nivel crítico, de solo 45.48%”.
Gas también preocupa
En los últimos días, la procuradora Margarita Cabello aseveró que su entidad está muy vigilante y ve la posibilidad de una carencia de gas, que se sumaría a la menor generación hidráulica.
Por eso hizo “un llamado de alarma” frente a la posibilidad de falta de energía y de agua en Colombia, “y lo más grave, de falta de gas, o por lo menos tener que importarlo”.
Según Cabello, “van a subir los recibos de gas en nuestro país, muchísimo, en virtud de la importación, si no dejamos libres dos grandes pozos que son Komodo 1 y Uchuva, en Santa Marta”.