Colombia tiene la oportunidad de convertirse en referente regional, junto a Chile, en la creación, expansión y consolidación de startups (empresas de base tecnológica que nacen con oportunidades de crecimiento más rápidas que una micro, pequeña o media empresa), así como de cualquier tipo de emprendimiento, o al menos eso creen algunos de los protagonistas del sector.
A cierre del primer semestre del año pasado, el número de startups en Colombia giraba entorno a 2.600. Y si bien tienen más oportunidades de sortear ese “valle de la muerte empresarial”, que dice que sólo tres de cada 10 empresas sobreviven a los primeros cinco años de funcionamiento, sí se convierten en protagonistas de un sector que requiere de apuestas para crecer.
“Una startup o emprendimiento no se muere por su modelo de negocio: muere por falta de flujo de dinero; ese es un plan principal a trabajar”, dijo Juan Camilo Quintero, gerente nacional de innovación y emprendimiento en la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi).
A partir de esa necesidad se dio a conocer un anuncio hecho por el presidente Iván Duque con el objetivo de darle más oportunidades de funcionamiento a las pequeñas y medianas empresas (pyme). Esto con la idea de que tengan un respiro económico que les valga para poder funcionar con algo más de tranquilidad.
La iniciativa, que se concertará en el Congreso, se trata de una promesa de campaña hecha por el mandatario y que se considera como otra de las bases del plan Estado Simple. Su base está en que las grandes empresas paguen en 60 ó 30 días las obligaciones con las pyme.
La idea es atacar, según lo dio a conocer Duque, algunas injusticias que regularmente se cometen sobre las micro, pequeñas y medianas empresas, entre las más importantes: “no se les paga en plazos oportunos, lo cual compromete su operación y su supervivencia”, aseguró el mandatario. Quien agregó que para que el plan sea más robusto se deben fijar herramientas sancionatorias, “pero lo que es más importante es que la sociedad, como un todo, entienda que es un principio de ética empresarial el pago oportuno”, agregó Duque.
Para José Miguel Jaramillo, cofundador de Urban Link (plataforma especialista en el alquiler de espacios comerciales) la garantía está en dar herramientas para que este tipo de empresas encuentren la oportunidad de abrirse a nuevos mercados: “Se necesita exportar más, que se dé a conocer ese valor agregado que tenemos; no basta sólo con la facilidad en el acceso a créditos, también que se incentive ese flujo de cartera”.
Chile acabó de aprobar un beneficio para las pequeñas y medianas empresas en ese sentido. La idea se quiere replicar en Colombia. El gobierno chileno sancionó una ley que obliga a las grandes empresas a pagar sus obligaciones con las pymes en un plazo no mayor a un mes.