Cuando se trataba de comprar vivienda en el Valle de Aburrá las miradas, por lo general, se dirigían al sur, a los municipios de Envigado, Itagüí y Sabaneta. No obstante, los altos costos, la fuerte densificación y la falta de predios para construir, generaron que Bello se convirtiera en el nuevo horizonte para la inversión inmobiliaria.
En el primer semestre del año fue el municipio del departamento con más ventas de vivienda reportadas. De las 21.700 unidades que se vendieron en Antioquia, en Bello compraron 4.522. Es decir, un 24 % del total.
Este crecimiento en la compra de vivienda pasa por encima de las problemáticas de seguridad en el municipio, lo que a juicio de Eduardo Loaiza, gerente de Camacol Antioquia, se debe a que los consejos de seguridad han logrado mejorar la confianza. Pero, el factor principal, es que los precios son más bajos.
En un proyecto en venta como Vitani en Niquía (Bello), se ofrecen apartamentos de 57.5m² desde 189,4 millones de pesos. Mientras que en Ciudad del Río, en Medellín, en Distrito Vera de 47.34m² se consigue desde 371,1 millones de pesos. Un poco más del doble y menos metros.
“Bello y otros municipios aledaños a Medellín como Rionegro, son áreas que se están desarrollando bien en cuanto a construcción porque el metro cuadrado es más barato en comparación con Medellín”, destacó Fabián Zabala, director jurídico de la Central de Arrendamientos.
El punto es, añadió Zabala, que ya no hay casi tierra disponible en las ciudades principales y la que hay es cara. “Los precios de las áreas conexas son competitivos y la movilidad es fácil”, concluyó.