Como una pedrada en el pocillo del café cayó ayer, al cierre del 90 Congreso Nacional Cafetero, la noticia que se empezó a ventilar desde el jueves en la noche, la cual daba cuenta de la renuncia del gerente de la Federación Nacional de Cafeteros, Roberto Vélez Vallejo.
“Me llamaron de Palacio”, confirmó el dirigente gremial, sin precisar quién, a nombre del presidente Gustavo Petro, le pidió que pusiera a disposición el cargo, al que llegó el 12 de agosto de 2015, es decir hace más de siete años.
La sorpresa fue generalizada, pues durante la semana y en desarrollo de la reunión anual del gremio en Bogotá se destacaron las cifras récord alcanzadas por esta actividad agrícola, entre ellas el valor de la cosecha para el año cafetero (contabilizado desde octubre de 2021 a septiembre de 2022), que superó los $14,5 billones, o el precio promedio de compra pagado entre enero y septiembre de este año que fue del $2,44 millones por carga de 125 kilos.
Pese a estas cifras favorables, Vélez comentó que “no es fácil entender el cambio”, pero explicó que el presidente Petro quiere a alguien más cercano, para trabajar en pro del sector.
“Este es un gremio que ha vivido durante toda su vida en una relación armoniosa con el Gobierno. Se necesita que exista ese trabajo mancomunado entre el Gobierno y los cultivadores para poder dar resultados a las 546.000 familias”, declaró en rueda de prensa, el dirigente quien es conocido como el samurái cafetero, por su paso en las embajadas de oriente como Malasia, Emiratos Árabes Unidos y Japón.
En esa línea, insistió en que “por el lado de los productores es necesario que se mantenga esa relación armoniosa con el Gobierno, que ya nos ha mostrado su voluntad de trabajar con los caficultores. (...) Hay que mantener ese matrimonio armonioso”.
El tinto servido
Pero, el gremio de los caficultores se quedó esperando a Petro para que clausurara el congreso anual, y explicará las razones para pedirle la renuncia al gerente Vélez.
El mandatario no llegó, pues desde la noche anterior en su cuenta de Twitter había anunciado que estaba enfermo y que esperaba recuperarse. En la mañana del viernes en la sede de la Federación, en Bogotá, el dispositivo de seguridad hacía pensar que Petro le daría cara a los cafeteros.
Luego se conoció que él llevaba tres días en Medellín tratándose de recuperar de una afección respiratoria. En su representación acudieron a la clausura de la reunión la ministra de Agricultura, Cecilia López; y el director del Dapre, Mauricio Lizcano.
Desde la base
Jorge Alberto Posada, representante de Antioquia ante los comités Directivo y Nacional de la Federación, se declaró sorprendido dada la buena gestión que venía desempeñando Vélez.
Para Marcelo Salazar, dirigente cafetero de Caldas, el hecho generó preocupación, no solo por lo inesperado, sino por la gestión exitosa que se estaba logrando, como el nivel de exportaciones que suma unos US$4.000 millones.
“La labor por las zonas cafeteras nunca termina. Hay un gran desconcierto por esa llamada y las intenciones del presidente Petro con el manejo de la agremiación”.
A su turno, Faber Buitrago, caficultor del Quindío, descartó que la salida de Vélez vaya a desunir a los cultivadores del grano, y resaltó como en la jornada inicial del congreso cafetero los asistentes aprobaron una resolución reconociendo la gestión del gerente de la Federación.
“No nos interesa casar confrontaciones con el Gobierno, por el contrario apostamos por el interés colectivo, y el paso al costado del doctor Vélez va en esa línea, para permitir que haya un proceso de transición que termine con la elección del gerente”, manifestó.
De acuerdo con los estatutos del gremio, una vez Vélez pase su carta de renuncia, cosa que hasta ayer no había sucedido, comenzará la recepción y postulación de candidatos de los cuales le elegirá una terna. Esos tres nombres serán llevados a consideración de una asamblea extraordinaria de la Federación, en la que se hará la elección, cosa que deberá ocurrir en los primeros meses de 2023.
