En el arranque de este 2022 son varios los negocios y proyectos empresariales que están pendientes de una resolución, involucrando directamente a grandes compañías antioqueñas.
Desde hace dos meses, por ejemplo, está en pie la Oferta Pública de Adquisición (OPA) lanzada por la sociedad Nugil del Grupo Gilinski por al menos el 50,1% de Nutresa, la holding de alimentos antioqueña que hace parte del llamado Grupo Empresarial Antioqueño (GEA).
También avanza la OPA por Sura, la cual fue presentada por la firma JGDB Holding de Gilinski con el propósito de quedarse con mínimo el 25,344% de las acciones del grupo de inversiones paisa.
El periodo de aceptaciones de estas ofertas termina esta semana. De adjudicarse los topes mínimos fijados por el oferente, estas adquisiciones moverían unos $10,99 billones, aplicando la actual tasa de cambio de $4.043,46.
Otra movida tiene que ver con la venta del Grupo Orbis a AkzoNobel, transacción que fue anunciada a finales de junio del año anterior, y con la que la empresa de Países Bajos aspira ampliar su presencia en Centro y Sur América.
Aunque no se revelaron los detalles financieros de la transacción, con la cotización actual de la especie de Orbis en la Bolsa de Valores de Colombia (BVC) de $49.029,20 el 100% que pretende AkzoNobel valdría $791.134 millones.
Despegue de turbinas
Tras el acuerdo entre EPM y el Consorcio CCCI, firmado a mediados de diciembre, se garantizó la continuidad de las obras de construcción del proyecto Ituango por ocho meses, más tres de empalme con un nuevo contratista.
La apuesta de esta extensión es que en el segundo semestre de este año entren en funcionamiento las dos primeras unidades de generación del complejo energético.
El mes pasado en visita a Medellín, el presidente Iván Duque aseguró que Hidroituango no solamente es un anhelo de Antioquia y de Medellín, sino “un anhelo de un país que quiere soberanía energética, que quiere salir adelante, que no se doblega y que entiende que la puesta en marcha de este proyecto es un reto de país y de futuro”.
Hilando y tejiendo
Otra compañía que debería tener este año un reinicio es Coltejer, que desde mediados del año pasado suspendió sus operaciones en la planta de Itagüí, en el sur del Valle de Aburrá.
La textilera argumentó en ese momento que el cierre sería temporal y reanudaría actividades dependiendo del resultado de los análisis y estudios que se efectuarían al respecto. A septiembre, la empresa observó un descenso en sus ingresos de 78,1%, al pasar de 68.931 millones en los primeros nueve meses de 2020 a $15.093 en el mismo periodo de 2021 (ver módulos).
Más expectativas
Entre las decisiones que aún están en el tintero y que deben conocerse en las próximas semanas se cuentan el nombramiento del presidente de Interconexión Eléctrica (ISA), pues luego de que Ecopetrol se hiciera con el control de esta empresa, su actual líder, Bernardo Vargas, presentó renuncia.
De otro lado, se aguarda la autorización definitiva para que la aerolínea Ultra Air, cuya base estará en el aeropuerto internacional José María Córdova de Rionegro, inicie su operación comercial.
Del abanico también hace parte el interés que tiene Essity Group Holding por comprar el 4,19% de las acciones que pequeños accionistas tienen en Productos Familia (ver Informe)
$10,9
billones moverían las OPA lanzadas por Gilinski por acciones de Sura y Nutresa.