-
Los habitantes de Granizal, una vereda ubicada en el municipio de Bello, llevan años enfrentando una grave escasez de agua potable. Foto: Julio César Herrera -
Esta situación ha generado múltiples inconvenientes para las familias de la zona, afectando su salud, higiene y calidad de vida. Foto: Julio César Herrera -
Con cerca de 30.000 habitantes, de los cuales el 65% son desplazados, Granizal es el asentamiento más grande de población desterrada de Antioquia y el segundo del país. Foto: Julio César Herrera -
No es solo la escasez de agua lo que agobia a esta comunidad, también es el riesgo de consumirla. Entre 2007 y 2015, estudios realizados por la Universidad de Antioquia encontraron coliformes fecales tanto de animales como de humanos en el agua del acueducto. Foto: Julio César Herrera -
La falta de acceso a este recurso básico ha limitado sus actividades diarias y ha generado un clima de incertidumbre y frustración en la comunidad. Foto: Julio César Herrera -
En 2015, interpusieron una acción popular que finalmente, en febrero de 2020, les dio la razón. La tutela ganada ordenaba a la Alcaldía de Bello y a las Empresas Públicas de Medellín (EPM) a garantizar el acceso al agua potable en el territorio. Foto: Julio César Herrera -
Sin embargo, a pesar de lo que parecía un triunfo con la acción popular, la solución llegó a medias: 170 tanques de 5.000 litros fueron instalados en diferentes puntos de la vereda para abastecer de agua a la comunidad. Foto: Julio César Herrera -
La Corporación Las Cometas, que acoge a cerca de 500 alumnos en sus aulas, ha sido testigo de la difícil situación. Los niños, luego de un día de juegos o de la clase de educación física, no pueden beber de la llave sin arriesgarse a un dolor de estómago. Foto: Julio César Herrera -
Muchas veces en el colegio los estudiantes se quedan sin con qué descargar los baños, lo que complica aún más las condiciones de higiene y la salud de los menores por no poder entrar al sanitario. Muchas veces Foto: Julio César Herrera -
El colegio solicitó un tanque adicional a EPM para abastecer los baños y el comedor, pero la respuesta fue negativa. Argumentaron que ya hay un tanque y que colocar otro resultaría inviable. Foto: Julio César Herrera
Comunidad del barrio Granizal claman por agua potable
En esta vereda del municipio de Bello, hogar de más de 30.000 personas, en su mayoría desplazados, el acceso al agua potable es tan esquivo como la paz que muchos quisieron encontrar
