Cuando pensaba que ya había “coronado” su viaje, en el último paso migratorio del aeropuerto José María Córdova, de Rionegro, las autoridades capturaron a un peruano que, según las investigaciones, venía a Medellín con la intención de explotar sexualmente a unas menores de edad, por las cuales habría pagado hasta 300.000 pesos.
Así lo confirmó el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, quien a través de sus redes sociales comentó que “se logró la captura por orden judicial de este sujeto de origen peruano y nacionalizado y residente en los Estados Unidos por el delito de demanda de Explotación Sexual y Comercial con menor de 18 años”.
Las investigaciones dieron cuenta que este extranjero habría alquilado una residencia mediante una aplicación y allí pactaría los encuentros con menores de edad, por los cuales le habría pagado a miembros de estructuras criminales el dinero pactado, que estaría entre los 150.000 y los 300.000 pesos colombianos.
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Al verificar que si se trataba de este peruano, quien venía desde Estados Unidos, decidieron sacarlo del aeropuerto, pero para que abordara una patrulla de la Policía Nacional y presentarlo ante un juez, que le dictó medida de aseguramiento en establecimiento carcelario, mientras se define su situación judicial por estos hechos
Esta detención se logró gracias al trabajo articulado entre la Alcaldía de Medellín, la Policía Nacional, la agencia HSI (Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional) y la Fiscalía General de la Nación.
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Este sería el quinto extranjero que no pudo ingresar a Medellín por ser señalado de intentar cometer delitos sexuales en la ciudad, luego de que se lanzara, el pasado 10 de abril, la campaña “No lo intentes, es un delito”, en el que se busca que los turistas extranjeros no llegue con fines criminales, sino netamente turísticos.
En lo que va corrido del año, además, 12 extranjeros han sido capturados por casos de delitos sexuales en la ciudad, situación que llevó a las autoridades de Medellín a intensificar los controles contra este fenómeno en los sitios con mayor concurrencia de turistas.
Así mismo, los investigadores colombianos avanzan en las labores para desmantelar las redes de explotación sexual que hay en la ciudad y en las cuales estarían implicadas organizaciones criminales colombianas y extranjeras.