Seis gremios de especialistas médicos advirtieron que dejarán de prestar sus servicios al Hospital General de Medellín y la red de centros de Metrosalud por cuenta de una millonaria deuda que ambas entidades vienen acumulando durante los últimos meses.
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“En la actualidad tenemos alta morosidad en la cartera, lo que impide el cumplimiento de obligaciones laborales y frente al sistema de seguridad social de nuestros afiliados, razón por la cual le informamos que de no honrarse el pago a nuestras agremiaciones, a partir del 1 de octubre de 2023 estaríamos en la imposibilidad financiera de continuar la prestación de nuestros servicios en la E.S.E. Hospital General de Medellín y la E.S.E. Metrosalud”, expresaron los especialistas en una comunicación conjunta dirigida al alcalde de Medellín, Daniel Quintero, este jueves 21 de septiembre.
La misiva fue firmada por el Sindicato Sogos, que agremia ginecólogos y obstetras; TOA, que agremia a traumatólogos y ortopedistas; Cirujanos de Colombia; Anestesiar, que agremia a anestesiólogos; TAHUS, que agremia ginecólogos y obstetras; y la Federación Gremial de Trabajadores de la Salud (Fedsalud).
Según aseguraron esas organizaciones, la deuda que el distrito acumula con ellas por el pago de sus servicios asciende por los menos a los $10.302 millones.
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En lo que va de este año, esta es la tercera vez que agremiaciones médicas lanzan un ultimátum a los hospitales públicos de Medellín por culpa de retrasos en el pago de sus servicios.
En junio pasado, más de 576.558 usuarios de Metrosalud estuvieron a escasas horas de quedarse sin especialistas en anestesiología, ginecobstetricia y ortopedia, luego de que esa entidad se colgara en pagos por más de $2.000 millones.
El cese de actividades, programado para el 5 de junio, logró frenarse luego de que los especialistas llegaran a un acuerdo con la entidad y esta prometiera no volver a verse en la misma situación.
En agosto pasado, gremios de pediatras y cirujanos también advirtieron que no aguantaban más demoras en el pago de sus servicios por parte del Hospital Concejo de Medellín, luego de que esa institución dejara acumular una deuda de por lo menos $800 millones.
Dicho paro también logró frenarse a escasas horas de la hora cero, luego de que esa institución se comprometiera ponerse al día.
Este nueva amenaza de cese de actividades vuelve a poner la lupa en los manejos financieros tanto de Metrosalud como del Hospital General de Medellín, que durante el último cuatrienio vienen arrastrando cuestionamientos por varios procesos de contratación y presuntas irregularidades administrativas.
