Tener que guardar un carro o una moto inmovilizada en Medellín se convirtió en un completo dolor de cabeza para los agentes de la Secretaría de Movilidad. Por más que partan a los conductores de motos y carros en la ciudad, no hay grúas suficientes ni espacio disponible en los patios del Tránsito.
Resulta que cuando decidieron retomar la operatividad y las sanciones a los infractores con rigurosidad, aparecieron un montón de limitaciones para hacer operativos que impliquen inmovilizar carros o motos porque más de 56.000 vehículos tienen copados los patios del Tránsito y no hay posibilidad de vender los automotores abandonados por las irregularidades en el contrato de chatarrización que tramitó la alcaldía de Daniel Quintero y que habrían puesto en riesgo recursos públicos por unos $33.000 millones.
El secretario de Movilidad de Medellín, Mateo González, aseguró que se encuentra buscando habilitar recursos para encontrar un nuevo espacio donde se pueden llevar los carros y motos inmovilizadas, reiterando que no recibió los dineros suficientes de la anterior alcaldía para poder ejecutar un proyecto de este tipo.
Al menos cuatro problemas tienen atados de pies y manos a los guardas en la ciudad y a la misma Secretaría para poder ejecutar las labores de control y cumplimiento de las normas de tránsito en las calles de la ciudad.
No hay capacidad en los parqueaderos
Para poder inmovilizar los vehículos, con esfuerzo, se están habilitando los parqueaderos de la Secretaría de Movilidad de Medellín, en el barrio Caribe, ya que los de la Feria de Ganados, en el noroccidente de la ciudad, y el del Parque de Las Aguas, en los límites de Girardota y Barbosa, que también pertenecen al Distrito, se encuentran colapsados.
“Tenemos los patios colapsados y un proceso de chatarrización intervenido por la Procuraduría y la Contraloría que no nos permite hacer nada porque firmaron un contrato para vender los vehículos por Ley de Patios en $93 el kilo, cuando en otras ciudades lo negociaban a $1.200-$1.400 el kilo. Hoy tenemos los patios llenos y una demanda en proceso”, explicó el secretario González.
La Ley de Patios (1730 de 2014) determina que si pasa un año sin que el propietario haya retirado el vehículo de los patios y no haya subsanado la causa que dio origen a la inmovilización y no esté a paz y salvo con los gastos de parqueadero o grúa, la autoridad de tránsito municipal o distrital podrá declarar su abandono y proceder con su venta.
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Cabe recordar que en los patios del Distrito se reparten los automotores de acuerdo con el tiempo que llevan inmovilizados.
Los que se encuentran ubicados en el norte metropolitano son para aquellos automotores que llevan más de un año sin que nadie los reclame y que están propensos a la ley de patios, mientras que en Feria de Ganados están los que han superado los tres meses. En Caribe se llevan los recién inmovilizados.
Se espera que en próximos días haya una solución a esta problemática, sea con la readecuación de estos espacios o con la consecución de un nuevo lugar para continuar con este proceso.
Tampoco hay grúas para llevar los carros
Así hubiera espacio en los parqueaderos del Tránsito, no hay grúas para llevar los carros y motos inmovilizados. En este momento solo hay tres en funcionamiento en la ciudad, según señaló el secretario González.
El panorama es delicado porque el Distrito cuenta con 12 grúas para el proceso de inmovilización y demás labores, pero nueve de ellas también se vieron afectadas por las irregularidades presupuestales que llevaron a que no quedara plata con qué hacerles mantenimiento. Actualmente se encuentran guardadas por problemas mecánicos o falta de aceites y llantas para poder circular.
“Para tener grúas, camiones y patios dejamos hace cuatro años $28.000 millones, ese fondo lo recibimos en $8.000 millones. Es una reducción absurda, casi la tercera parte. Eso nos lleva a que no tengamos 12 grúas sino tres, por ejemplo, para operar”, expresó el secretario.
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El 15 de diciembre pasado denunciamos en estas páginas que los guardas de la Secretaría de Movilidad estaban trabajando con las uñas porque cada día tenían más carros y motos malas y no había quien los arreglara por falta de contrato. En ese momento había 70 motocicletas fuera de servicio por temas mecánicos, además de 12 carros que estaban a la espera de recibir los servicios mecánicos necesarios para volver a las calles.
Solo hay 500 guardas en la ciudades
Los números se siguen quedando cortos si hablamos de que hay menos guardas de tránsito de los que necesita la ciudad para controlar un parque automotor que ya supera el 1.300.000 vehículos que hacen uso de las vías, con las problemáticas anexas por regular como son las congestiones y los accidentes de todo tipo.
Sin embargo, actualmente solo hay 500 guardas de tránsito para controlar todo el parque automotor y, de acuerdo con las cuentas, se requieren, por lo menos, otros 600 más para poder hacer más eficiente la operatividad, aunque se está buscando que estos lleguen, así sea, de forma temporal.
Explicó el secretario que el objetivo es tener más o menos unos 1.200 o 1.300, de manera que haya un agente de tránsito por cada 2.000 habitantes en la ciudad.
“Eso implica un reto financiero, hay que buscar el mecanismo jurídico para revisar cómo podemos aumentar la planta sin que las finanzas del municipio se vean afectadas. Mientras tanto, el objetivo es poder aumentar porque la administración anterior bajó de 200 agentes a 50”.
La plata de los partes no se está cobrando
Hay muchos planes en camino, pero parte de la desfinanciación de la Secretaría de Movilidad de Medellín tiene que ver con que muchos de los 715.034 comparendos que se hicieron el año pasado no se cobraron.
“Tenemos hoy una disminución del 85% del recaudo en cobro coactivo, pasamos de $75.000 millones a $11.000 millones. Eso es muy lamentable”, expresó el funcionario.
Adicionalmente se dejó vencer el pasado 31 de diciembre el contrato de mandamientos de pago, por lo que para poder efectuar los cobros se está buscando el apoyo de la Secretaría de Hacienda de Medellín para intentar recaudar la mayor cantidad de dinero posible y así recapitalizar la entidad para poder cumplir todos los planes que se tienen en el corto plazo.
Mientras tanto y se solucionan los problemas presupuestales y logísticos de la ciudad, los guardas seguirán haciendo peripecias para poder cumplir con los objetivos de controlar la movilidad y garantizar la seguridad vial en la ciudad, sancionando a quien no respete las normas de tránsito de la ciudad y salvando las vidas.
