Dos casos de agresión contra agentes de las Secretarías de Movilidad de Medellín y Bello se registraron este jueves por parte de conductores de moto, quienes reaccionaron violentamente cuando los uniformados iban a sancionarlos por cometer infracciones de tránsito. En uno de los casos, un guarda debió ser trasladado a un centro asistencial.
El caso más delicado ocurrió en el barrio Santa Ana, de Bello, cuando en las afueras del colegio Tomás Cadavid un conductor de moto que estaba irrespetando la medida del pico y placa fue interceptado por los agentes de tránsito y con la finalidad de escapar al accionar de las autoridades, este optó por arrollarlo, provocándole múltiples lesiones en su cabeza y manos.
Debido a que el uniformado tenía episodios de desorientación tras recibir el golpe por parte del motociclista, en una ambulancia del Cuerpo de Bomberos de Bello lo trasladaron hacia la Clínica del Norte, donde se le dejó bajo observación por 12 horas por la conmoción cerebral que sufrió. Además, debió ser intervenido de una fractura en su muñeca izquierda.
La pronta reacción de los otros agentes de tránsito permitieron interceptar al conductor, a quien entregaron a las autoridades para que respondiera por el delito de violencia contra servidor público.
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Además le impusieron las sanciones respectivas por transitar en horario restringido, lo que tiene un costo de 573.000 pesos, además de los gastos de parqueadero y grúa.
Adicionalmente, al conductor señalado de la agresión le realizaron la respectiva prueba de embriaguez, la cual le marcó negativa, aunque se le hizo una contraprueba, cuyo resultado se conocerá en los próximos días.
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Ya en horas de la tarde se conoció un segundo caso en el centro de Medellín, en la carrera 54 (Cúcuta) con la calle 45 (Amador), cuando un motociclista y su pasajera fueron interceptados por dos agentes de la Secretaría de Movilidad de Medellín para sancionarlos, al parecer, por mal parqueo.
En ese momento comenzaron las agresiones entre los agentes de tránsito y el motociclista infractor, quien pretendía escapar de la zona, al parecer porque los uniformados le encontraron más infracciones que obligaban a la inmovilización del automotor.
En medio de este altercado, a uno de los guardas le reventaron la nariz y ante esto, el personal de la Policía Metropolitana detuvo tanto a la mujer como al hombre que iban en esta motocicleta.
De acuerdo con los registros de la Secretaría de Movilidad de Medellín, este año se han denunciado más de 50 agresiones a los agentes de tránsito, solo en la capital antioqueña.