El cuarto periodo de sesiones del Concejo de Medellín se instaló en la mañana de este domingo, en medio de un caldeado ambiente por la renuncia de Daniel Quintero a la Alcaldía de Medellín y en un acto que debió liderar el mandatario encargado de la ciudad, Óscar Hurtado.
Al evento acudieron los 21 corporados de la ciudad y allí el nuevo alcalde señaló que se debatirán proyectos como las transferencias extraordinarias para las instituciones de educación superior de la ciudad y los ajustes salariales al alcalde, el personero y el contralor, como principales temas.
En medio de la instalación, el presidente del Concejo, Fabio Humberto Rivera, señaló sobre la salida de Quintero que era una decisión que respetaba, pero no compartía.
Adicionalmente tendrá la mirada muy puesta en todos los proyectos que presente la administración, asegurando que “se van a aprobar los que beneficien a Medellín y se van a rechazar los que la perjudiquen”, dijo Rivera.
La instalación de las sesiones se realizó con las críticas de concejales de oposición a la renuncia del exalcalde Quintero para apoyar la campaña de Juan Carlos Upegui y continuar con su proyecto político.
Uno de los primeros en hablar fue Alfredo Ramos Maya, del Centro Democrático, quien manifestó: “Se van Quintero y Diana Osorio, jefes del cartel de corrupción más grande de la historia de Medellín, pero no se ha ido la corrupción de la Alcaldía. Evitan el empalme, porque los cobardes son incapaces de darle la cara a la ciudad. Algún día caerán”.
Sebastián López, de este mismo partido y con quien tuvo un fuerte altercado el pasado 22 de septiembre en la sede del Concejo, sacó pecho de esta renuncia y dijo: “Lo logramos Medellín ¡Sacamos a Quintero! El peor alcalde en la historia de nuestra ciudad. Nunca más un alcalde ladrón en Medellín”.
Luis Bernardo Vélez, quien incluso llegó a la corporación por Independientes, el partido de Quintero, y quien después se declaró uno de sus más duros opositores, señaló: “La ciudad está botada hace mucho tiempo por Daniel Quintero. Qué horror que puedan más los egos, los intereses personales y la polarización, que el servicio y amor por Medellín. La ciudad tiene que recuperar su rumbo de unidad y comunidad. ¡Cuidemos a Medellín!”.
La voz de Simón Pérez, a quien el mismo Quintero llamó “Bobo”, también se escuchó en las redes sociales: “Una renuncia que refleja desespero e irresponsabilidad con la ciudad. No era gobernar a Medellín su prioridad. Sin dignidad por el cargo”.
Otro de los concejales más críticos de su mandato, Daniel Duque, hizo un extenso pronunciamiento señalando que Quintero fue el peor alcalde de la historia de la ciudad, pero afirmó que “renuncia para hacerle quites a la norma y evitar ser destituido de su cargo”.
Pero no faltaron los concejales de la línea de gobierno que ratificaron su apoyo al exalcalde, como fue el caso de Carlos Mario ‘Mocho’ Romero, quien es concejal por el partido de Quintero.
“Los que hace cuatro años votamos por la esperanza y no por el miedo sabremos distinguir el poder de la verdad en Medellin. Recuerden que el uribismo se sostiene de crear terror para vender falsa seguridad, y estas elecciones no son la excepción”, dijo el corporado, luciendo una foto de Quintero.
Los otros concejales de los partidos Conservador y Liberal, que están más alineados a Quintero, al igual que Jaime Cuartas, del Partido Verde, prefirieron guardar silencio sobre el tema.