En la noche del 21 de noviembre de 2021, Anderson Ignacio Rodríguez Laya fue asesinado por hacer lo que siempre hacía: invitar con desparpajo, amabilidad y uno que otro chiste a las personas que caminaban por la 70 para ingresar al restaurante donde trabajaba.
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Ese día, dos sujetos con camisetas de Atlético Nacional llamados Davison Stiven Pareja Estrada, de 26 años; y Bayron Bedoya, de 18, estaban parados en la cera frente al restaurante, en la 70 cerca a Laureles, cuando Rodríguez Laya, un mesero venezolano de 28 años, los saludó y los invitó a pasar al establecimiento de comidas rápidas para que comieran y cambiaran la mala cara por la derrota de Nacional contra Millonarios. Esto fue suficiente para que los dos hombres la emprendieran contra él y le propinaran una terrible golpiza que terminaron con varias puñaladas. Los dos sujetos huyeron del lugar y Rodríguez quedó tendido en vía pública desangrándose hasta morir.
Con los registros de las cámaras de seguridad, las autoridades emprendieron la búsqueda de los dos sujetos que fueron capturados cinco días más tarde, portando el arma homicida y las camisetas ensangrentadas. Aún así, cuando fueron presentados ante un juez de control de garantías decidieron no aceptar los cargos.
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Año y medio tardó la Fiscalía para recoger las pruebas que llevaran al juez penal del circuito de Medellín a concluir que fue Bayron Bedoya, el joven de 18 años, quien le propinó las puñaladas mortales en el tórax a Rodríguez esa noche del 21 de noviembre de 2021.
Esta es la segunda condena más alta en Colombia contra un supuesto hincha por el delito de homicidio. En 2010, Juan David Henao Rúa y Luis Felipe Muñoz Arango fueron condenados a 40 años de prisión por su responsabilidad en el homicidio de Julián Andrés Moreno Clavijo, en hechos ocurridos el 27 de septiembre de 2009 cuando barristas de Atlético Nacional e Independiente Medellín se enfrentaron en el sector de La Garrucha, jurisdicción de Marmato (Caldas), con armas corto punzantes.
