En medio de la tensión que se ha vivido en Venezuela producto de los comicios presidenciales del pasado 28 de julio, varios menores de edad han sido detenidos de forma arbitraria por las autoridades del gobierno chavista. Una parte de estos jóvenes estaría siendo torturada en un centro de reclusión, según lo denunciaron sus familiares.
Ocho adolescentes que están recluidos en la Casa de Justicia 431 aseguraron para una entrevista con el medio internacional CNN que fueron torturados para aparecer en un video diciendo que la oposición les había pagado 50 dólares para aparecer en las manifestaciones.
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Theany Urbina, madre de Miguel Urbina, de 16 años, aseguró ante ese medio que en “Zona Siete (lugar donde están recluidos) les pasaban corriente”, además de explicar una de las presuntas formas de torturas aplicadas a los menores de edad.
“Hay una cosa que llaman la capucha de cebollita, consiste en que le ponen una bolsa en la cara con gas lacrimógeno”, declaró la madre de familia.
Diomer Gómez, de 17 años, es otro de los jóvenes que están presos por las autoridades, a quienes sin ninguna prueba los acusan de incitación al odio, terrorismo y hurto calificado. En el caso de Gómez, según su hermana Dionexis García, la retención fue sin orden judicial, además de que estuvo desaparecido durante 12 días.
Dionexis denunció que su hermano tiene una goma en la espalda y no le han dado la atención necesaria. “No le han mandado hacer exámenes, no le han mandado hacer placas. Solo nos mandaron a comprar unas inyecciones y unas pastillas. No sabemos más nada”, respondió la hermana de Diomer.
“Le pido a las autoridades de Venezuela que liberen a todos los menores de edad que tienen sus condiciones físicas. Mi hijo tiene una desviación en la columna y cada vez que lo visito lo veo peor”, declaró para un medio local Adelaida Herrera, madre de Bleider Herrera, quien tiene 17 años y está retenido desde el pasado 31 de julio.
Según la ONG Foro Penal, en Venezuela hay 1.808 presos políticos, de las cuales 1.651 personas son civiles y 60 detenidos son personas entre los 14 y 17 años. Esta misma organización también ha denunciado que a corte del 9 de septiembre hay más de 9 mil personas que han sido detenidas arbitrariamente.
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