“Mi gobierno buscará redefinir las relaciones con los socios europeos y trabajará para mejorar las relaciones comerciales y de inversión con la Unión Europea”, afirmó el nuevo primer ministro de Reino Unido, Keir Starmer.
En una rueda de prensa previa a la presentación de su agenda legislativa, Starmer ya había hablado de la necesidad de un acuerdo post-Brexit con Bruselas mejor que el negociado previamente por Theresa May y Boris Johnson.
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“Creemos que podemos conseguir un acuerdo mejor que el acuerdo chapucero que Boris Johnson trajo a casa”, declaró Starmer, “y trabajaremos en ello, entendiendo el trabajo que hay que hacer y la naturaleza del desafío”, añadió.
Recientemente, en el programa ‘El Discurso del Rey’ con la participación del soberano Carlos III, Starmer, de 61 años, ratificó en su plan de gobierno el deseo de alcanzar estabilidad económica reconstruyendo relaciones con sus aliados europeos.
En Londres, muchos europeos, en su mayoría jóvenes adultos, sienten esperanza con el planteamiento de Starmer, deseando que se restablezca la libertad de circulación, una de las principales víctimas del Brexit.
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El resultado del plan laborista para estrechar lazos con Europa sigue siendo incierto, pues depende en gran medida de factores externos, entre ellos las próximas elecciones presidenciales estadounidenses.
El profesor Jonathan Portes, experto en las relaciones entre el Reino Unido y la UE en el King’s College de Londres, afirmó a EuroNews que pasará algún tiempo antes de que se aclaren las perspectivas de futuro.
“Si se alcanzan pronto acuerdos positivos, podría generarse una dinámica política y económica que presionara a ambas partes para ir más lejos y más deprisa”, dijo.
“Por el momento, creo que realmente no lo sabemos. Y también dependerá, francamente, de presiones y consideraciones geopolíticas más amplias”, concluyó.
El laborista Keir Starmer, quien llegó al poder al ganar las elecciones del 4 de julio, poniendo fin a catorce años de gobiernos conservadores, anunció en el programa con el Rey que también tiene intención de suprimir el derecho hereditario de alrededor de un centenar de miembros de la Cámara de los Lores.
Los casi 800 miembros de la Cámara de los Lores no surgen de elecciones, al contrario de lo que ocurre con los Comunes, sino que son nombrados por el rey y tienen un poder consultivo.
Además, confirmó también su deseo de crear una nueva fuerza de seguridad con los medios de que disponen las unidades antiterroristas para luchar contra el “crimen organizado” en materia de inmigración irregular.
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La creación de este nuevo “comando de seguridad fronteriza” pretende reforzar la lucha contra los traficantes, que han permitido que cerca de 90.000 inmigrantes lleguen al Reino Unido desde 2022 cruzando el Canal de la Mancha, que separa las costas de Francia e Inglaterra, en pequeñas embarcaciones. Tras ganar las elecciones, Keir Starmer confirmó que abandonaba el proyecto de los conservadores de deportar a Ruanda a inmigrantes irregulares.
Los laboristas llegaron con intenciones de cambios considerablemente distantes a las políticas que imperaron en los últimos años, y prometieron que los presupuestos que presenten serán evaluados por un organismo independiente, la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria (OBR), para garantizar la estabilidad económica del país. “Cada cambio significativo en los impuestos y el gasto estará sujeto a una evaluación independiente”, añadió.