Eran talentosos, dedicados, y profundamente unidos. La familia Groff-Saini se dirigía a celebrar un cumpleaños en Catskills cuando su avioneta, un modelo Mitsubishi MU-2B, se estrelló el 12 de abril en una zona rural de Copake, Nueva York, convirtiéndose en el segundo accidente trágico en menos 72 horas en la ‘Gran Manzana’.
La avioneta, una Mitsubishi MU2B40, se estrelló en un campo a 16 kilómetros del aeropuerto local del condado de Columbia poco después del mediodía.
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Otro accidente similar ocurrió el 10 de abril cuando un helicóptero Bell 206 se precipitó en el río Hudson, dejando como víctimas mortales a todos sus tripulantes: el piloto y una familia de españoles identificados como Agustín Escobar, su esposa Mercè Camprubí, y sus tres hijos menores de edad que hacían turismo.
Dos días después, las seis personas que viajaban a bordo de la aeronave Mitsubishi MU-2B, fallecieron en el accidente, generando conmoción en la región. Por estos casos, la Administración Federal de Aviación (FAA) iniciará una revisión de la licencia de los operadores turísticos implicados en los accidentes.
La familia accidentada en zona rural de Copake, Nueva York
Michael W. Groff, piloto del avión y reconocido neurocirujano, volaba con su esposa, Joy Saini, una cirujana pélvica experta y fundadora de un centro de salud femenina en Boston. Michael se enamoró de la aviación a los 16 años, enseñado por su padre. Joy, por su parte, dedicó su vida al bienestar de las mujeres.
Viajaban también sus hijos, Jared y Karenna Groff. Jared, graduado en economía y ciencias políticas, trabajaba como asistente legal en Nueva York y se preparaba para ingresar a la facultad de derecho. Su novia, Alexia Couyutas Duarte, con quien compartía formación académica, había sido aceptada en la Facultad de Derecho de Harvard para este otoño y también los acompañaba en el viaje.
La Asociación Americana de Cirujanos Neurológicos (FAANS) lamentó la muerte de Michael W. Groff, quien nació el 21 de mayo de 1996.
Karenna, exfutbolista universitaria y nombrada Mujer del Año 2022 por el Fútbol americano universitario (NCAA, por sus siglas en inglés), estaba construyendo una carrera en medicina en NYU Langone, dentro del Departamento de Neurocirugía, para seguirle los pasos a su padre.
Su pareja, James Santoro, trabajaba como asociado de inversiones en Silver Point Capital y, según sus familiares, planeaba proponerle matrimonio este verano, pero todo se truncó por este accidente en el que fallecieron ambos.
“Eran una familia maravillosa. El mundo perdió a muchas personas muy buenas que habrían hecho mucho por el mundo si hubieran tenido la oportunidad. Todos estamos devastados”, expresó Jonh Santoro, padre de James, en conversación con la agencia AP.
Un allegado de los Groff también los describió como “personas brillantes, dinámicas y cariñosas”, en un comunicado enviado a Mid-Hudson News. Destacó que la familia tenía una historia de superación, compromiso con la sociedad y un futuro prometedor.
El accidente ocurrió cerca de las 12:15 p. m. cuando la avioneta se aproximaba al Aeropuerto del Condado de Columbia. La subjefa del sheriff local, Jacqueline Salvatore, explicó que el acceso a los restos fue complejo: “(La avioneta) está en medio de un campo y hay bastante barro, por lo que el acceso es difícil”.
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La Administración Federal de Aviación (FAA) y la Junta Nacional de Seguridad del Transporte ya iniciaron una investigación para determinar las causas del siniestro.