China llevó a cabo un ejercicio militar que llamó la atención del mundo, al ensayar un misil balístico intercontinental en el océano Pacífico. El Ministerio de Defensa chino comunicó que el lanzamiento, realizado en horas de la mañana del 25 de septiembre.
El lanzamiento se llevó a cabo con una ojiva ficticia y cayó en una zona que había sido calculada antes del lanzamiento. Este tipo de misil, uno de los más potentes del mundo, tiene la capacidad de transportar cargas nucleares devastadoras.
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Aunque el ministerio describió el ejercicio como parte de un “plan de entrenamiento anual rutinario”, la falta de detalles sobre el lugar de impacto y si el misil fue disparado desde tierra o desde un submarino ha levantado dudas entre sus vecinos.
Esta acción ocurre en medio de una creciente rivalidad con Estados Unidos, tensiones en el Mar de China Meridional con Filipinas y una abierta hostilidad hacia Taiwán, que Pekín considera parte de su territorio.
El anuncio del ensayo no pasó desapercibido. Nueva Zelanda calificó el lanzamiento de “inoportuno e inquietante”, anunciando que consultaría con sus aliados en cuanto a más detalles. Desde Japón, el portavoz del gobierno, Yoshimasa Hayashi, expresó que no hubo aviso previo sobre el lanzamiento y que el incremento de capacidades militares de China es motivo de “sería preocupación”.
Por su parte, Australia exigió “explicaciones” de China, enfatizando que el fortalecimiento militar de Pekín se realiza sin la transparencia esperada de una gran potencia.
El hecho también buscaría mostrar la modernización continua del programa nuclear chino, que se ha acelerado en los últimos años. El Departamento de Defensa de EE.UU. ha indicado que China está ampliando su arsenal nuclear más rápidamente de lo que se anticipaba, con más de 500 ojivas nucleares operativas a partir de mayo de 2023 y la proyección de alcanzar más de 1,000 para 2030.
Pekín ha rechazado estas afirmaciones, defendiendo que su arsenal nuclear, aunque modesto en comparación con el de EE. UU. y Rusia, es una medida de autodefensa.
Según el Instituto de Investigación Internacional para la Paz de Estocolmo (Sipri), Estados Unidos cuenta con aproximadamente 3,700 ojivas nucleares y Rusia con cerca de 4,500, mientras que China tiene alrededor de 410.
La reciente prueba en el Pacífico, además de suscitar inquietudes en la comunidad internacional, subraya la transformación del enfoque de China hacia sus ejercicios militares. En el pasado, el país realizaba ensayos en su propio espacio aéreo, lo que hacía que el ejercicio actual sea aún más significativo y revelador de la dirección de su política militar.
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