En menos de 30 días, Colombia alcanzó cinco medallas mundiales en la prueba del keirin, dos en la categoría de mayores y tres en la juvenil, un hecho histórico que ubica al país entre los mejores de dicha especialidad del pedalismo de pista.
Esta prueba, que se originó en Japón, y en la que se va primero detrás de un motociclista (3 vueltas), consta luego en sobrepasar rivales en una pista de 250 metros a la que se le dan tres giros más. Gana el que cruce primero la meta. En ella priman técnica, destreza, potencia y velocidad.
Aún con el recuerdo intacto de la presea de plata de Martha Bayona en el Campeonato Mundial de ciclismo celebrado en Reino Unido a comienzos de agosto, y de la conquista de Kevin Quintero en ese mismo certamen ante la élite de este deporte, otro grupo de talentosos corredores que no superan los 20 años de edad, asombraron el pasado fin de semana en Cali durante el Mundial júnior.
Primero fue el barranquillero Francisco Jaramillo, al ganar plata en el keirin masculino, y luego Stefany Cuadrado y Nathalia Martínez, quienes obtuvieron oro y plata, respectivamente, en la competencia femenina.
Al ver el buen palmarés que vienen construyendo casi todos estos deportistas, se evidencia que los metales que acaban de lograr no fueron fruto de la casualidad.
Bayona ya había ganado plata en el Mundial de Hong Kong-2017; Quintero se adjudicó el bronce en la cita de Francia-2022; mientras que Jaramillo, el año pasado, también fue subcampeón en Israel.
La antioqueña Cuadrado, por su parte, en este mismo Mundial júnior, había conseguido plata en la velocidad.
Y si se quiere hacer un poco más de memoria, Fabián Puerta ganó oro en el Mundial de mayores en Países Bajos-2018 después de haber sido cuarto en los Olímpicos de Río-2016.
Pero, ¿a qué se deben tan gratos resultados?
Bayona deja por un instante su timidez y sin titubear expresa que simplemente tienen al mejor entrenador del mundo. Y resalta que el trabajo y los buenos procesos traen consigo la recompensa.
El orientador que cita es John Jaime González, seleccionador nacional que lleva 25 años en la dirección técnica, que estudió Ciencias Aplicadas al Deporte en Barcelona, es especialista en Planificación Deportiva de la Escuela Nacional del Deporte y quien además tuvo la oportunidad de hacer el estudio del keirin en Japón, donde le dieron la licencia de dicha prueba siendo corredor.
Al ser indagado por los buenos resultados en cuanto al keirin y al cambio de estrategia en la que se ve a los colombianos pedalear desde atrás y remontando rivales, González indicó que el keirin ha tenido dos momentos. “Uno, cuando Fabián Puerta fue campeón del mundo, en el que la moto se retiraba faltando dos vueltas y media, y ahora se retira faltando tres. ¿Por qué esperar tanto para atacar?”, el mismo técnico responde.
“Esa estrategia de esperar y esperar se la vendí a mis corredores, de no ir a pelear con el otro arriba cuando los demás van más frescos. Es mejor que todo se calme para luego salir a atacar”.
Y esa fórmula, sumada a la confianza y respeto que tiene con sus dirigidos, le viene funcionando al estratega, quien tiene de momento un amplio porcentaje para clasificar tanto a Quintero como a Bayona a los próximos Juegos Olímpicos de París-2024.
Por lo pronto, Colombia confirma que tiene presente y futuro para continuar alcanzando alegrías en esta prueba de la velocidad.
Con talento también en semifondo
En el Campeonato Mundial de pista júnior también se lució la antioqueña Juliana Londoño, luego de conquistar dos preseas. Primero se llevó el oro en el ómnium y luego ganó plata en la persecución individual. Con el tiempo de 2.19,047 que registró, consiguió nuevo récord nacional y panamericano en esa última prueba.