Una relación de mutuo beneficio. Así es como muchos empresarios e inversionistas entienden el proceso de conceder o adquirir una franquicia.
También implica riesgos, por supuesto. Pero las posibilidades de éxito son superiores, especialmente cuando hay, de parte y parte, seriedad, compromiso y ganas de trabajar.
En el sector de confección y moda hay mucho potencial para explorar el concepto de franquicias. En Medellín existen empresas que consideran que este modelo de negocios es el que va a permitir una mayor expansión de su nombre, es decir, de su trabajo.
De eso está segura Luz Eugenia Botero, directora del Cluster Textil de Confección Diseño y Moda. "Esa es la dinámica que persiguen las empresas que hacen parte de un sector que tiene clase mundial, como este", dijo esta directiva.
Para ella, el mecanismo tiene dos ventajas fundamentales. "Primero, es una optimización de recursos, porque montar almacenes es muy costoso. Segundo, si mi marca está hoy en Medellín pero quiero llegar a Cúcuta y no tengo el conocimiento necesario para entrar a un mercado nuevo, se requiere la experiencia que tenga el otro en esa ciudad. Eso no se logra en dos días".Los pioneros del sector
Juan Fernando Arbeláez gerente de la empresa Ragged, lleva casi un año con esa idea entre ceja y ceja. Los resultados, para este empresario, ya están dando frutos. En pocos meses abrirá su primera franquicia en Bucaramanga.
"Antes no creía mucho en la idea de franquiciar mis tiendas, pero ahora soy un convencido del éxito que se puede conseguir", dice.
Otro reporte de optimismo es entregado por Adriana Sánchez, gerente de Adrissa, quien está trabajando en este proyecto desde hace un año.
Ambos empresarios, han sorteado con éxito cada uno de los nuevos desafíos que se han presentado en el sector textil y de modas de esta ciudad.
"El contrabando, la tasa de cambio, el lavado de activos, la contracción de la economía, son algunos de los retos que hemos tenido que superar", dice Arbeláez.
En el mismo sentido, Adriana Sánchez comenta que para una empresa como la que dirige, "el mundo es la competencia".
En efecto, el segmento de moda y confección se enfrenta a la llegada de marcas muy buenas, reconocidas a nivel internacional, con calidad y diseño.
Pero al mismo tiempo, compiten con productos de carácter masivo, calidad discutida y precios increíblemente bajos, que, principalmente, provienen de Asia.
Tal vez estos fenómenos, sumados al conocimiento e investigación que imprimen a su trabajo, es lo que hace que estas empresas sean las primeras del sector en aventurarse a entregar franquicias en otras ciudades del país.
Luz Eugenia Botero lo resume de esta manera. "Uno necesita una estructura clara, procesos organizados. Se requiere una gestión de la marca y del conocimiento muy grandes antes de emprender este proceso".
Para esta experta, entregar ese conocimiento es imprescindible. "Todo tiene que estar documentado, eso significa compartir la estrategia con un socio".
Así es la filosofía que promueve Franquicias de Colombia: "Gana el franquiciante porque expande su negocio y consolida la marca de su empresa; gana el franquiciado porque desarrolla un negocio exitoso y rentable, y gana el país porque aumentan las fuentes de trabajo, el desarrollo económico y el bienestar general".
La directora del Cluster Textil asegura que el paso de establecer franquicias debe ser el sueño de muchos empresarios del sector en Medellín. "Existen todas las ventajas. La clave está en entregar el conocimiento y vigilar que se cumpla".
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