En el arte, específicamente en la música, en el rap, Juan Pablo Barragán encontró el camino para huirle a la calle.
Hoy es uno de los actores jóvenes más reconocidos en el país, gracias al talento que deja en cada uno de sus roles. Con su personaje de Marcos Tibatá, en La ley del corazón, le ha robado el corazón y los aplausos a los televidentes. Aunque muchos creen que su camino comenzó en Lady, la vendedora de rosas, como el Mono, su trayectoria es extensa y fructífera en el teatro y el cine -donde ya ha hecho diez películas-.
Es graduado de la Universidad Distrital de Bogotá y hace parte del grupo musical La familia Yoky Barrios, que ha participado en importantes festivales del país, incluido Altavoz en Medellín.
En sus raros libres siempre está en funciones educativas y didácticas, transmitiendo conocimientos, incentivando a los más jóvenes por el camino del arte.
Desde La Paz, Bolivia, donde está rodando su nueva película, Juan Pablo nos habló de este momento profesional y personal.
¿El Mono, su personaje en Lady, la vendedora de rosas, fue el disparador de su carrera?
“El Mono fue el primer papel de reparto en televisión, aunque mi primer novela fue A mano limpia. Lady disparó mi carrera en televisión, porque en teatro ya tenía un largo recorrido, al igual que en cine. Cuando llegué a Lady ya estaba haciendo mi sexta película, pero sin duda, el Mono mostró que había un man llamado Juan Pablo que a la hora de interpretar un personaje lo hacía muy verídico”.
¿Le han sorprendido las buenas reacciones que ha generadoel personaje de Marcos Tibatá?
“Con el Mono me pasaba que la gente era toda brava conmigo, pero eso no se compara con lo que ha pasado con Marcos Tibatá, que ha generado una identificación muy bonita, estoy muy sorprendido con los alcances del personaje”.
¿Cómo fue la elaboración de ese rol?
“Fue muy difícil, alguien inclusive me dijo que yo estaba acostumbrado a hacer personajes populares y que La ley del corazón era una serie elegante, afortunadamente los resultados son los que hablan, creo que Mónica Agudelo escribió muy bien ese personaje y yo le busqué el alma.
El referente que tuve fue la vida de muchos colombianos que la guerrean y demuestran que no todo lo del barrio es feo, porque hay una costumbre en la televisión y es la de mostrar que la gente pobre siempre es ñera, tramposa o mala, y con Marcos mostramos lo bonito de la gente”.
Contrario a Tibatá aparece el rol del narco en Alias JJ... ¿Fueron complejas las escenas de su relación homosexual?
“Se grabaron en épocas distintas, creo que ese es el trabajo del actor, el reto es adecuarse a los personajes y las situaciones, fue extraño porque nunca me había besado con un hombre, es solo trabajo, que se toma de la manera más profesional y respetuosa.
Cuando uno hace bien las cosas la gente lo respeta, todos los comentarios han sido enfocados a lo actoral y eso me llena de satisfacción, creo que de uno como actor deben hablar más de su trabajo que de su abdomen plano”.
Usted es músico, muy vinculado con el movimiento Hip Hop ¿Sigue vigente en la música, está trabajando en algún proyecto en este sentido?
“Canto Hip Hop, mi agrupación se llama La familia Yoky Barrios, llevo desde el 96 haciendo música en Bogotá, siempre he estado con el movimiento rapero, este género fue el que me salvó de la calle, el que le llevó a los escenarios, donde conocí el teatro, el cine y la televisión, le debo mucho al rap, Ahora estoy trabajando en mi tercera producción discográfica, que lleva como título Obra negra.
Partimos de la base de que el hip hop no es violencia, que no está vinculado con la delincuencia, sino que es una herramienta de transformación. Con la música le quiero decir a la gente que uno puede estar donde quiere estar”.
¿Qué lo desconecta de la cámaras, del reconocimiento de la gente?
“La música y el trabajo comunitario, cuando me desconecto de la cámara estoy en eso, trabajando en el barrio dictando talleres, mirando qué me invento o gestiono, porque creo que de nada sirve el conocimiento sino se multiplica. La educación es la única herramienta que puede ayudarnos a pensar de otra manera”.