Diecinueve años atrás, cuando el más grande beisbolista colombiano de la historia, Édgar Rentería tenía 25 años y jugaba para los Cardenales de San Luis, había impuesto la cifra de mayor número de extrabases (16) de un pelotero criollo en las Grandes Ligas, hasta ese momento, Giovanny Urshela contaba con 9 años de edad y jugaba pelota en las categorías menores de su ciudad natal Cartagena.
Gio, como se le conoce en Estados Unidos, a donde fue a parar en 2009 al vincularse en las divisiones menores del béisbol organizado, con The New York-Penn League, viene escribiendo un inusual y, a la vez, inédito, registro de poder al bate que no solo amenaza algunas cifras de Rentería, como esta, al igualarle en cuadrangulares en una temporada, el jueves pasado, sino del otro jugador nacional que, en méritos le sigue al barranquillero, Orlando Cabrera, oriundo de Cartagena.
Con 16 vuelacercas, Urshela, “un extraordinario pelotero que se comporta igual de bien a la ofensiva como a la defensiva custodiando la tercera almohadilla”, según comenta Alberto Agamez, especialista en este deporte, está a un batazo de cuatro esquinas de igualar el vigente mayor número de jonrones de un colombiano en la Gran Carpa: 17, en poder del pequeñín Cabrera.
Ese récord que, seguramente, Urshela dejará atrás, en el transcurso de este fin de semana, quedará en la historia del año 2003, cuando Orlando (retirado como jugador activo en 2011) y jugando para los Expos de Montreal pegó 17. Se necesitaron 13 años para destrozarlo.
Más aún. Las cifras son dicientes: Édgar Rentería sumó 16 jonrones en su quinto año en Grandes Ligas, en 150 partidos y 562 turnos al bate. Cabrera lo hizo en su séptima temporada, con 162 juegos y 626 apariciones al cajón de bateo. Gio lo logra más temprano que ambos: en su cuarta campaña, con 95 encuentros disputados (incluyendo la caída 8-2 de anoche con Azulejos) y 306 veces al madero
Ello quiere decir que, aún sin terminar la campaña regular, el joven pelotero aumentará irremediablemente tal número. Es más, se da el lujo de decir que es el primer colombiano en dar 4 cuadrangulares en dos partidos seguidos. ¡Increíble!
“Solo he puesto en práctica las enseñanzas que me brindaron cuando estuve en la triple A (equipos de ligas menores) de Yanquis. Me he consolidado, me tengo más confianza”, había dicho para el portal yanqui días atrás. Supo aprovechar las enseñanzas, hoy recoge frutos excepcionales.