Terminó la fase de grupos de la Copa América que dejó algunas polémicas, entre ellas, las decisiones que se han tomado desde el VAR, las cuales han sido influenciadas por malos trazos en las líneas y mala utilización de las cámaras. En algunos casos, hasta la Conmebol ha salido a reconocer la existencia de errores.
Desde que se implementó la asistencia del videoarbitraje en el fútbol, se buscó que se minimizara la polémica y que la herramienta redujera los errores evidentes que podría presentarse en un partido, como lo es un gol mal validado, una acción de pena máxima mal sancionada o descubrir aquellos jugadores que aprovechaban su lejanía del árbitro para agredir al rival.
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Sin embargo, durante la Copa América que se está disputando en Estados Unidos, el VAR ha estado lejos de este propósito y ha dejado pasar errores evidentes y no ha cumplido su función de ser una ayuda para quienes dirigen la parte disciplinaria dentro del terreno de juego.
Una de esas polémicas ocurrió en el partido entre Chile y Canadá, cuando en los primeros cinco minutos del encuentro, mientras el equipo norteamericano se disponía a cobrar un tiro de esquina, Bombito, atacante canadiense, agrede con el codo a Echeverría, jugador chileno.
Según el reglamento, dicha agresión es causal de expulsión, por lo que, al no ser vista por parte del juez central, el VAR debe interferir para alertarlo y así él tome la decisión de acuerdo a la normativa.
Al revelarse los audios y las grabaciones por parte de Conmebol, se evidencia que quienes apoyaban en ese encuentro desde el videoarbitraje al central Wilmar Roldán, no usaron correctamente las cámaras disponibles y no hicieron la revisión rigurosa, dejando pasar la agresión y una expulsión que pudo haber cambiado en el desenlace del juego.
Al final del encuentro hubo un empate 0-0 que clasificó a los norteamericanos a la siguiente fase y eliminó a los australes de la competencia, Canadá terminó con los once jugadores y Chile con 10, luego de que más tarde uno de sus futbolistas fuera expulsado por doble amonestación. La Conmebol reveló el audio al día siguiente reconociendo un error en la revisión de dicha jugada.
Otro momento de polémica se dio en el partido entre Estados Unidos y Uruguay, encuentro que definía los clasificados del grupo C, allí los norteamericanos debían ganar para pasar a cuartos de final.
En el minuto 66, luego de un cobro de tiro libre, Uruguay anotó el primer y único gol del partido, sin embargo, tras una sospecha de un fuera de lugar, la acción pasó a revisarse desde el VAR.
La anotación fue confirmada por el videoarbitraje. Sin embargo, al momento de mostrarse las imágenes usadas desde el VAR queda la duda sobre la elección de los ángulos para la revisión de la jugada, pues las tomas de estas eran muy lejanas al terreno de juego, lo que pudo incidir en la precisión del trazo de la línea para detectar si Araújo no estaba en posición inválida al momento de cabecear.
El momento más escandaloso del VAR ocurrió en el último partido de la fase de grupos, el cual se disputó entre Colombia y Brasil. Allí las imágenes dejaron en evidencia una presunta mala utilización de la herramienta.
En el primer tiempo, James Rodríguez pateó un tiro libre desde el costado derecho hacia el área brasilera. Allí se levantó Davinson Sánchez y anotó de cabeza, lo que era en ese momento el empate de los colombianos ante Brasil. Sin embargo, el juez de línea levantó la bandera acusando de la existencia de un fuera de lugar.
La jugada fue revisada y el juez argentino Mauro Vigliano confirmó desde el VAR que sí existía fuera de lugar. El escándalo se da momento después de que la transmisión reveló que el trazo de las líneas para medir el fuera de lugar no se hizo sobre Davinson Sánchez, quien era el que había cabeceado el balón, sino con referencia al delantero Jhon Córdoba, jugador que sí estaba adelantado, pero que no interfirió en la jugada, por lo que su posición no debió tenerse en cuenta.
Como propósito de dar garantías, la Conmebol está revelando los audios de las jugadas con intervención del VAR al día siguiente de haberse disputado los partidos. Sin embargo, en algunas de estas ha sido la misma organización la que ha tenido que reconocer que hubo errores, caso como el de Chile - Canadá y Ecuador - Jamaica, en este último sí hubo una buena implementación desde quienes manejaban el videoarbitraje, pero el juez central tomó una decisión errada al no sancionar un penal a favor de los jamaiquinos.
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