El legendario jugador de Portugal, Luis Figo, tiene su propio documental en Netflix y allí revela la verdad sobre uno de los fichajes más polémicos en la historia del fútbol. Hay que recordar que Figo pasó del Barcelona al Real Madrid, dos clubes que sostienen una de las rivalidades más añejas del fútbol mundial.
En 1998, Luis Figo era el jugador más codiciado del mundo y en ese año protagonizó una de las escenas que le dio la vuelta al mundo. Figo salió al balcón del gótico Palau de la Generalitat, la sede de la Presidencia de Cataluña, llevando puesto el uniforme de su club y con el pelo teñido de azulgrana y amarillo y, frente a una fervorosa multitud, coreó con el micrófono en mano: “¡Blancos, llorones, feliciten a los campeones!”, esto tras el título del cuadro catalán en la liga española.
Dos años más tarde, Figo llegó al Camp Nou, el recinto del Barcelona, vistiendo la camiseta del Real Madrid en medio del ambiente más hostil que se haya visto en el fútbol.