El seleccionado colombiano perdió la final contra Brasil con un contundente 6-2 en contra.
Más de tres millones de personas vieron, por celular, la final de la Kings World Cup Nations 2025 entre Colombia y Brasil, que se jugó este domingo en el estadio de la Juventus de Turín, en suelo italiano.
Los cientos de aficionados que llegaron a las tribunas del escenario vieron un partido de fútbol siete entretenido entre los dos seleccionados suramericanos, que fueron los mejores del torneo.
En la cancha adaptada de 65 metros de longitud, por 45 de ancho y arcos un poco más pequeños que los que tienen las canchas de fútbol once, los deportistas colombianos intentaron conseguir su primer título mundial.
Sin embargo, no lo consiguieron. Los brasileños, que durante todo el torneo mostraron un rendimiento sólido (golearon 7-4 a Corea del Sur en el encuentro de la primera ronda, 9-2 a Alemania en la segunda, 12-4 a Turquía en los cuartos de final y 3-1 a México en semifinales), se quedaron con los honores.
El encuentro fue parejo durante los primeros minutos, cuando había solo dos y tres jugadores en cancha. Sin embargo, el seleccionado brasileño fue el que más opciones de peligro generó. No obstante, el arquero colombiano Camilo Mena, que durante el torneo fue la figura del elenco nacional, se mostró sólido.
El juego se decantó en favor de los brasileños cuando faltaban pocos minutos para el final del primer tiempo, cuando el azar eligió, mediante el lanzamiento de un dado al aire, que los equipos se enfrentaran de a 4 jugadores.
En ese momento, apareció el futbolista brasileño Kelvin Oliveira, a la postre máxima figura del encuentro. Él marcó el primer tanto del juego. No obstante, la alegría de los brasileños duró poco.
Un par de minutos después, el jugador colombiano Angellot Caro empató el partido con un golazo. Desde afuera del área picó el balón y colgó al arquero de Brasil. En los primeros minutos del segundo tiempo pareció que la fortuna le sonreía a Colombia. Por eso, llegaron varias veces al arco del equipo rival, pero sus jugadores no tuvieron la claridad necesaria para definir.
En el penalti del presidente, una figura que tiene este torneo inventado por el exfutbolista Gerard Piqué y el creador de contenido español Ibai Llanos, los colombianos se fueron adelante en el marcador. El 2-1 puso a soñar a los nuestros con el título.
Pero Brasil dio vuelta al partido con una actuación magistral de Kelvin. Este jugador fue el encargado de anotar el resto de goles para el definitivo 6-2. La corona la recibieron en la tribuna del estadio turinés. Además, celebraron que tuvieron al máximo goleador del torneo: Kelvin Oliveira, quien en los cinco partidos que disputaron, celebró 19 tantos.
Los colombianos, por su parte, quedaron algo aburridos. Sin embargo, sacaron pecho gracias a que el arquero Camilo Mena fue elegido el guardameta más destacado del certamen. Colombia ganó 4-1 su primer partido contra Marruecos. En la segunda ronda, se impuso 2-3 ante Turquía. En cuartos de final venció 6-1 a Uzbekistán y en semifinales, 1-2 a Marruecos.
