El muñeco, que llevaba una camiseta de Vinicius Junior, apareció colgado, simulando un ahorcamiento, el 26 de enero, después de la victoria por 3-1 del Real Madrid en el derbi que le enfrentó al Atlético de Madrid en cuartos de final de la Copa del Rey, junto a una pancarta en la que se podía leer “Madrid odia al Real”.
Tras este incidente, el Real Madrid denunció un “lamentable y repugnante acto de racismo, xenofobia y odio contra nuestro jugador Vinicius”, afirmando esperar “que se depuren todas las responsabilidades de quienes hayan participado en un acto tan deleznable”. Inmediatamente se abrió una investigación.
Las pesquisas, basadas principalmente en testimonios, permitieron establecer que estos cuatro hinchas, habían sido “identificados durante partidos calificados como de alto riesgo dentro de los dispositivos de prevención de violencia en el deporte” eran los “presuntos autores” de los hechos, subrayó la policía.
Se necesitan “medidas drásticas”
El entrenador del Real Madrid, Carlo Ancelotti, exhortó este martes a las autoridades competentes a tomar “medidas drásticas” contra los casos de racismo en los estadios de fútbol.
“Esto tiene que parar. Nos pasa cada día. Les pasa a muchos otros, a Vini pero a otros. Le dicen hijo de puta, maricón, que se muera tu padre, tu madre... No es una guerra, es un deporte. Es el momento, tenemos una gran oportunidad de parar esto”, afirmó Ancelotti este martes, antes del partido del Real Madrid contra el Rayo Vallecano el miércoles (12:30 p.m.), en el que Vinicius estará suspendido tras la tarjeta roja que recibió el domingo.
“Es un momento importante para tomar medidas drásticas. Las instituciones tienen una oportunidades, sobre todo ahora, para tomar medidas radicales en este tema importante”, insistió el técnico italiano.
“Para mí, es un momento que tiene que servir para todos. Queremos darle la vuelta a esta situación, todos, es muy mala para todos, nos gusta el fútbol, lo amamos, esperamos que sea lo más limpio posible... Estamos esperando a ver qué pasa. Tomar medidas es lo más normal para mí. Aquí miro a la federación y a LaLiga, y a la inteligencia de los aficionados de fútbol, y a la educación, sobre todo, a la educación de cada uno”, explicó.
“Condenar no es suficiente. Hemos empezado a condenar hace mucho tiempo. Después de condenar, tienes que actuar, y hasta ahora no se ha actuado. Es un problema de racismo y también de insultos. Hay países donde no te insultan. En Inglaterra no te insultan, porque este tema lo han resuelto hace mucho tiempo, en 1985, cuando fueron excluidos de las competiciones europeas, ahí resolvieron este caso. En los partidos de la liga inglesa no hay policía”, dijo comparando a España con Inglaterra.
Por su parte, Vinicius, que está “un poco triste” según su entrenador, no participó en la sesión colectiva de este martes en Valdebebas porque tenía “una molestias en la rodilla”.