La Selección Colombia prepara el duelo de este viernes ante Costa Rica (5:00 p.m.), su segunda presentación en la Copa América en la que podría adelantar la clasificación a la siguiente fase.
En el plantel y entre los aficionados hay fe en que se llegará a instancias finales, apoyados en el invicto de 24 fechas y el juego desplegado en el triunfo 2-1 frente a Paraguay.
El exzaguero mundialista Luis Carlos ‘Coroncoro’ Perea habló con EL COLOMBIANO desde EE. UU. de las opciones de título de la Tricolor y de otros aspectos del certamen.
¿Qué sensación le quedó de la Selección tras el debut?
“Muy buena. Sin ser brillante, lujoso o estético como en partidos anteriores, jugó bastante bien. Se ajustó a las condiciones del rival y logró una importante victoria”.
¿Usted cree que el favoritismo que le otorgan a la Tricolor puede jugar en su contra?
“Cuando uno llega a una competencia como estas, con ese invicto y con la manera como ha venido jugando, es inevitable que le otorguen ese favoritismo. Eso no es un invento, es algo que los jugadores han creado en las presentaciones previas. Así uno quiera vender otro discurso, siempre lo van a mirar diferente. Para un futbolista es inevitable sentir ese sabor dulce de jugar bien y ser favorito. Esos comentarios, si bien son buenos, no los marean, saben lo que han hecho, lo que viven y gozan en los buenos momentos, porque cuando llegan los malos ratos también los sufren. Empezar con triunfo los hace conscientes de lo que son capaces de hacer, de la responsabilidad que tienen con ellos y el país”.
¿Qué diferencias encuentra entre el equipo actual de Colombia y la Selección del 94 que usted integró?
“Ya ganaron el primer juego, esa es la primera diferencia; nosotros perdimos con Rumania. Ellos vencieron a los paraguayos y el hecho de ganar da confianza en sí mismos, en el grupo y refuerza lo que se ha hecho. Si bien en ese entonces llegamos invictos y favoritos, la competencia como tal es diferente, una es Copa y la otra un Mundial, aunque tienen el mismo sistema. Porque jugar tres partidos en fase de grupos no es tarea fácil, el nivel de nerviosismo es bastante grande y demostraron que podían superar ese nivel y lo hicieron con creces; esperemos que sigan creciendo y nos puedan dar esa copa que estamos anhelando”.
¿Habrá alguna ventaja sabiendo que ya conocen el juego de Costa Rica, el rival del viernes?
“Cada encuentro trae sus propios enredos. Vi a Costa Rica encerrado en su campo los 90 minutos, sin darle ventajas a Brasil que no tuvo suerte para hacer goles. Disparó muchas veces al arco, sin suerte. Los colombianos vienen triunfadores y con una estrategia preparada. Seguro a nosotros tampoco nos va a dejar jugar, harán lo mismo, creerán que a Colombia como está jugando la pueden neutralizar defendiéndose así, esperemos a ver cómo se resuelve”.
Aparte del trabajo de James Rodríguez y Richard Ríos, ¿le llamó la atención otro desempeño?
“Me gustó mucho el trabajo de Jéfferson Lerma, siempre juega bien, es la balanza de Colombia. Esta vez se sumó Richard, anclados ahí con un derroche físico impresionante. El clima en este tiempo en EE. UU. es duro, complicado, muy húmedo, estamos en verano, hace demasiado calor y no brisa. Estos muchachos desde lo defensivo ofrecieron mucha energía para vencer a Paraguay, que no fue pera en dulce. Colombia salió y presionó en bloque. Los paraguayos llegaron poco gracias al trabajo defensivo de todo el equipo”.
¿Realmente Colombia tiene argumentos para ser campeón, o estamos muy folclóricos?
“Hoy en día como aficionado miro el fervor del colombiano, y yo no lo llamaría fanatismo o folclorismo, lo llamo pasión por su nación, por su equipo. Estamos ilusionados, el país necesita y quiere vivir estas situaciones, sabiendo que en la parte social hay tantas dificultades. El fútbol nos está dando un escape a todo eso. Ver en un territorio lejano, en un estadio repleto de camisetas, a casi 67 mil personas cantando el himno nacional, emociona. Aunque no me atrevo a decir que vamos a ser campeones, sí me ilusiona lo que están haciendo los muchachos. Empezamos bien, no es malo reír, gozar, disfrutar, apegarnos a lo que ellos realizan en la cancha. Vivamos la esperanza hasta donde sea posible”.
Un lunar grande es el estado de la canchas, ¿cuál es su opinión al respecto?
“Las canchas acá eran sintéticas, pero por especificaciones de la Fifa se modificaron a grama natural y para ese cambio hizo falta tiempo. No están aptas para jugar fútbol correctamente, pero eso es lo que hay, no hay ventaja ni desventaja para nadie, son iguales para todo el mundo. Así que hay que jugar y ganar. Al final nadie se puede excusar en que los escenarios estaban malos”.
¿Qué selecciones cree usted serán más protagonistas en esta Copa América?
“La que me gustó del todo fue Uruguay. Ese equipo sí lo doy como favorito. Juega muy bien al fútbol, es físico, ahoga, asfixia. Tiene grandes jugadores y bloques bien diseñados para defender y atacar. Sin embargo, presenta baches y ante Argentina y Colombia, en caso de que los enfrente, debe tomar correctivos para mejorar. Es el mejor elenco que he visto en esta Copa América”.
¿Y la Argentina de Messi?
“Uno no los puede descartar por la presencia de Lionel Messi y porque son campeones del mundo. En el primer partido ganaron, pero no fueron contundentes”.