Óscar Darío Arce Valenzuela tiene una historia similar a la de su paisano Carlos Sánchez. Nació en Chocó hace 25 años, también llegó sin historia a Uruguay y actualmente es uno de los colombianos con más mercado en ese país.
Después de conformar las selecciones infantiles de Unguía, Óscar desafío las fuertes olas que caracterizan el paso desde su departamento hacia Turbo, donde empezó a soñar en el semillero Urabá Junior gracias al apoyo del formador Pedro Pablo Palacio.
“Su gran potencial físico, deseos de salir adelante y facilidad para dominar la pelota y jugar en varias posiciones”, recuerda Pedro Pablo, fueron determinantes para que Óscar emigrara a los 16 años al Juventud Piedras, donde arrancó la carrera profesional que lo tiene hoy haciendo patria en el fútbol internacional.
“Me desempeño como lateral izquierdo y también lo hago como volante por ese mismo sector. Pienso que el colombiano está dando una muy buena imagen en el exterior por su calidad y por eso cada día llegamos más rápido al fútbol extranjero”, destacó Óscar desde Maldonado.
Ahora en Atenas, conjunto al que llegó por solicitud del técnico Edgardo Arias, quien “me tuvo en otros clubes, caso de Rampla Juniors”, Arce se propuso ser protagonista de la Primera División charrúa, en la que participan otros tres colombianos: Carlos Valdés (Nacional), Flavio Córdoba (River Plate) y Miguel Antonio Murillo (Tanque Sisley), quien es su gran amigo allá.
Ahora que Colombia dejó dudas en la Copa América y tuvo problemas de laterales y recuperadores, Óscar está empeñado en imitar a Carlos Sánchez, quien llegó a la Selección de Colombia gracias a su desempeño en Uruguay.
“Jugar con el combinado patrio es mi sueño desde niño y creo que algún día lo puedo lograr, porque soy un jugador potente, con técnica, buena pegada y muy agresivo a la hora de marcar”, destacó Arce Valenzuela, quien también jugó en el Brasov de Rumania.
El objetivo principal de este admirador del brasileño Ronaldo es “hacer historia en el fútbol”. Por esta razón Óscar Darío se propuso “pelear los puestos de arriba con Atenas para buscar un cupo internacional que nos sirva para ratificar que el jugador colombiano es bueno, alegre y protagonista en el exterior, porque se adapta rápido y lucha para hacer realidad sus sueños” .