La final será este sábado, Sabalenka espera rival. La otra semifinal la disputan Iga Swiatek y Madison Keys.
La campeona defensora Aryna Sabalenka dejó de lado su estrecha amistad con Paula Badosa para superar a la española y avanzar a su tercera final consecutiva del Abierto de Australia y seguir en camino a su primera final en 26 años.
La número uno del mundo bielorrusa ganó con parciales de 6-4, 6-2 en el Rod Laver Arena y se enfrentará a la segunda cabeza de serie polaca Iga Swiatek o a la decimonovena cabeza de serie estadounidense Madison Keys en el partido decisivo del sábado.
Las canchas duras y rápidas de Melbourne Park han sido el lugar feliz del joven de 26 años.
Ahora ha ganado 20 partidos consecutivos en el Abierto de Australia para acercarse a su tercera corona consecutiva, algo que no ha sucedido en este siglo.
La última persona en lograr la hazaña fue Martina Hingis en 1999 y sólo otras cuatro mujeres han completado el tricampeonato: Margaret Court, Evonne Goolagong, Steffi Graf y Monica Seles.
La corte estaba en el estadio observando.
“La verdad es que no lo sé. Estoy muy orgullosa de mí misma. Estoy orgullosa de mi equipo por haber sido capaces de ponernos en esta situación”, dijo Sabalenka sobre estar a punto de conseguir su tercer título.
“Es un privilegio, ¿sabes? Si puedo dejar mi nombre en la historia, significará mucho. Significará mucho para mí”.
El año pasado, Sabalenka describió a Badosa como su “mejor amiga” y “alma gemela” y dijo que estaba “súper feliz” de poder jugar juntas en un escenario tan grande.
“Un partido difícil, una batalla difícil”, dijo.
“Espero que siga siendo mi amiga. Estoy seguro de que me odiará durante la próxima hora, día o dos, pero estoy bien con eso, puedo manejarlo.
“Después de eso creo que volveremos a ser amigos, a salir juntos y a ir de compras”.
A pesar de su amistad, todo era trabajo en una fresca tarde de Melbourne.
La undécima cabeza de serie, Badosa, sorprendió a la número tres del mundo, Coco Gauff, en sets seguidos para alcanzar su primera semifinal de Grand Slam a la edad de 27 años y salió con todo.
La victoria mantuvo viva la aspiración de Sabalenka de seguir siendo la número uno del mundo cuando abandone Melbourne.
Si hubiera perdido, Swiatek lo habría recuperado. Si ambas se enfrentan en la final, la ganadora se marchará del torneo con el primer puesto en la clasificación.
A pesar de perder, la llegada de Badosa a semifinales coronó una remontada notable.
Ex número dos del mundo, pasó varios meses fuera tras una brutal lesión de espalda en 2023 y el año pasado consideró dejar el tenis.
En cambio, sus hazañas en Melbourne la devolverán al top 10 por primera vez desde octubre de 2022.
