El escritor colombiano, que falleció hace 10 años, es reconocido como uno de los más influyentes de la literatura en español. Ganó el Premio Nobel en 1982.
Gabriel García Márquez es el nombre de moda en este momento en el mundo literario. No solo porque este 6 de marzo cumpliría 97 años, sino porque el miércoles fue el lanzamiento oficial de “En agosto nos vemos”, su novela póstuma, uno de los acontecimientos de este año en la literatura.
La obra póstuma, que fue editada y publicada por Penguin Random House, luego de que los hijos del Nobel de Literatura colombiano decidieran lanzar al mundo el texto en el que Gabo trabajó entre finales del siglo pasado y los primeros años de este, tiene como protagonista a una mujer y sucede en una isla del caribe, que dicen que podría ser San Andrés.
Con esto se mantiene la tendencia de Gabo en sus diez relatos anteriores: todas están ambientadas en el caribe, la región que tanto defendió. En agosto nos vemos es la décimo primera novela de García Márquez. Salió al público 69 años después de que el escritor publicara La Hojarasca, su primer gran texto, que fue impreso en 1955 en una editorial Argentina.
En las obras siguientes exploró temas como el amor, la violencia, la novela policiaca, el relato histórico, entre otros. Las décadas en las que más novelas publicó el escritor colombiano fueron las de los años 60 -cuando era un joven literato que estaba descubriendo el mundo y estaba consolidando su familia con Mercedes Barcha Pardo- en la que publicó El coronel no tiene quien le escriba, La mala hora y Cien años de soledad, así como la de los ochenta, donde ya siendo un novelista consolidado, con renombre, publicó Crónica de una muerte anunciada, El amor en los tiempos del cólera y el General en su laberinto.
Desde la última vez que se publicó una novela en vida de García Márquez, hasta este año, donde salió al mundo “En agosto nos vemos” pasaron 20 años. En su momento, Gabo no quiso que el texto, del que había hecho por lo menos 12 borradores, saliera a la luz. Su esposa, Mercedes, respetó su decisión. Sin embargo, después de su muerte en 2020, la obra del escritor quedó en manos de sus hijos, quienes decidieron darles a los lectores en 2024 el último texto inédito del Nobel. Gabo, ahora sí, parece eterno.
