Xavier Vendrell, la cabeza del colectivo “Activistas por el Cambio”, un grupo de jóvenes reconocidos por trabajar a favor de las marchas y manifestaciones del presidente Gustavo Petro, ya recibió su primer contrato en el Gobierno. Se trata de un estratega político español que tiene líos jurídicos con su país, pero que recibió una nacionalidad exprés y ha asesorado varias campañas del mandatario.
Su contrato lo reveló El Tiempo y en él queda claro que, desde el pasado 23 de marzo, Vendrell firmó con la Unidad Administrativa Especial de Organizaciones Solidarias, entidad con la que trabajará por 9 meses y por una suma de 45 millones de pesos.
Según información oficial, en esa unidad se encargan de “diseñar, adoptar, dirigir, coordinar y ejecutar los programas y proyectos para la promoción, planeación, protección, fortalecimiento y desarrollo de las organizaciones solidarias”. Y según el contrato, Vendrell tendrá que asesorar la “estrategia de Compras Públicas Locales en el marco de la Agenda de asociatividad para la Paz”.
Así las cosas, el trabajo oficial que ahora tendrá Vendrell con el Gobierno Petro será darle continuidad a la implementación de esa estrategia “a través de acciones de promoción y fomento de la economía popular, social y solidaria, con estrategias de sostenibilidad y redes para el desarrollo de circuitos de comercialización y mercados e interlocales”, indica el contrato en las bases del SECOP.
Ese contrato también revela que Vendrell ya recibió un primer pago “correspondiente a los días ejecutados desde el acta de inicio del contrato hasta el día último del respectivo mes”. Para los próximos meses, recibirá pagos mensuales por cinco millones de pesos mensuales y un pago final “por valor del saldo del contrato, a la ejecución y cumplimiento del 100 % del contrato”.
Su contratación quedó en firme a través de Mauricio Rodríguez, posesionado recientemente como director de la Unidad Administrativa Especial de Organizaciones Solidarios, Uaeos, del Ministerio de Trabajo, cuya cabeza es la exmilitante del partido comunista colombiano, Gloria Ramírez.
Rodríguez y Vendrell se conocieron cuando trabajaron en la campaña de Petro junto a los testigos electorales, de quienes recientemente La Silla Vacía reveló una investigación por pagos irregulares y no reportados.
Este polémico español también está involucrado en la creación de “Activistas por el Cambio”, una organización que se convirtió en el corazón del partido del presidente Petro. Ese colectivo digital, del que Vendrell es cerebro, tiene tareas tan específicas como ser el “soporte popular del gobierno”, impulsar los balconazos, manejar bases de datos y defender las propuestas del mandatario en chats de WhatsApp y Telegram.
Y eso no es todo, Vendrell tiene una empresa llamada Export Group con registro mercantil en Colombia, en la que el español, Manuel Graul funge como representante legal. Ambos tendrían intereses económicos para quedarse con contratos en Colombia.
Precisamente, tanto Vendrell como Grau han tenido beneficios gracias a la cercanía que gozan con el presidente Petro y la primera dama, Verónica Alcocer. Estos dos españoles obtuvieron la nacionalidad colombiana por orden del presidente, participan en reuniones y hasta viajan en comisiones oficiales sin ser funcionarios del gobierno.
Por un lado, Manuel Grau es un empresario que extendió sus franquicias en Colombia en 2012 y ha sido contratista del Estado. Y una investigación de La Silla Vacía detalló que Grau se ha reunido con funcionarios del gobierno y hasta ha servido de puente con el presidente Petro. Además, Grau fue uno de los personajes que acompañó a Verónica Alcocer, en enero pasado, en su visita al Papa Francisco al Vaticano. Se presentó como funcionario público sin serlo, cuya conducta es calificada como delito por el Código Penal.
Según El Espectador, Grau estaría detrás del Ministerio de Cultura, incluso, varias fuentes consultadas por ese diario, confirmaron la influencia del español en la salida de Patricia Ariza, la exministra de esa cartera. “Los catalanes tienen mucho poder”, dijeron.
Ahora, por el lado de Vendrell, lo que más le pesa es su pasado en España. De acuerdo con las revelaciones de La Silla, Xavier Vendrell tiene pendientes en su país natal por malversación, prevaricato, soborno y tráfico de influencias. A eso se le suma que el catalán perteneció al grupo terrorista Tierra Ilustre y después de su desmovilización se sumó a las voces que pedían la independencia de Cataluña de España.
Mientras tanto, los registros de la prensa española indican que tiene desde 2020 cuatro imputaciones por corrupción. Una de las líneas de investigación tiene que ver con que habría utilizado negocios privados para favorecerse a sí mismo y a sus proyectos usando una red clientelar.
Por su parte, Petro ha salido en defensa de Vendrell asegurando que “es un empresario cuyo delito es ayudar a la independencia de Cataluña”.
