La Superintendencia Nacional de Salud decidió abrir investigaciones preliminares contra la EPS Sanitas, debido al presunto incumplimiento en la entrega de medicamentos e insumos a gran parte de su población afiliada.
Estos procesos se iniciaron después de que la EPS no resolviera 605 reclamos en salud en los términos establecidos y no cumpliera con las instrucciones impartidas a través de dos requerimientos emitidos por la Supersalud para abordar 837 casos relacionados con esta problemática.
Presuntamente, la EPS Sanitas no garantizó a los usuarios el servicio de salud con oportunidad, continuidad e integralidad, lo que los llevó a acudir a la Supersalud en busca de una solución efectiva para obtener los servicios de salud requeridos.
El 31 de octubre pasado, la Superintendencia requirió a la EPS Sanitas para resolver de fondo 837 reclamos en salud relacionados con la falta de entrega de medicamentos.
Sin embargo, un día después, se comprobó que aún persistía la desatención de las reclamaciones formuladas por los usuarios, lo que llevó a un segundo requerimiento.
En este segundo requerimiento, solo se reportaron 232 reclamaciones solucionadas del total requerido, considerando el peligro inminente para la vida y la integridad de los afiliados.
La Delegatura para Investigaciones Administrativas inició estas averiguaciones preliminares con el objetivo de obtener los elementos necesarios para determinar si existe mérito para iniciar un proceso administrativo sancionatorio contra la EPS Sanitas, en cumplimiento del debido proceso.
Por su parte, la entidad prestadora de salud, Sanitas, respondió que están buscando un plan de contingencia para poder entregarle los medicamentos a todos sus afiliados luego de que la droguería Cruz Verde decidiera cortar la entrega a los pacientes de esa EPS y se abriera el debate en cuestión.