Pico y Placa Medellín

viernes

0 y 6 

0 y 6

Pico y Placa Medellín

jueves

1 y 7 

1 y 7

Pico y Placa Medellín

miercoles

5 y 9 

5 y 9

Pico y Placa Medellín

martes

2 y 8  

2 y 8

Pico y Placa Medellín

domingo

no

no

Pico y Placa Medellín

sabado

no

no

Pico y Placa Medellín

lunes

3 y 4  

3 y 4

language COL arrow_drop_down

MinCultura estudia sanciones por intervención en Fuerte de Cartagena

La obra en Cartagena se ejecutó sin ninguna autorización del Ministerio de Cultura, autoridad competente en este caso. Avanza indagación preliminar.

  • El Fuerte San Sebastián del Pastelillo, que sustituyó al antiguo fuerte del Boquerón, está ubicado en el barrio Manga, en la bahía de la ciudad amurallada de Cartagena. FOTO efe
    El Fuerte San Sebastián del Pastelillo, que sustituyó al antiguo fuerte del Boquerón, está ubicado en el barrio Manga, en la bahía de la ciudad amurallada de Cartagena. FOTO efe
21 de agosto de 2021
bookmark

El Ministerio de Cultura determinará la técnica para restaurar el Fuerte San Sebastián del Pastelillo, que fue intervenido por la Sociedad Club de Pesca de Cartagena, entidad sin ánimo de lucro encargada de su custodia, en un procedimiento que pudo haber afectado su estructura. Así lo informó ayer Angélica Mayolo, ministra de Cultura, quien agregó que el Club cubrirá los costos de las reparaciones, que deben hacerse en el menor tiempo posible.

La decisión la anunció ayer Mayolo, luego de la visita técnica que hizo una comisión de la cartera, para analizar el impacto de las intervenciones desarrolladas en el lugar. Previamente, el Ministerio había ordenado suspender cualquier obra en este sitio, que desde el 20 de enero de 1944 fue delegado por la Sociedad de Mejoras Públicas al Club de Pesca para que lo custodiara y conservara, con la condición de no efectuar reformas arquitectónicas que cambiaran el aspecto original de la fortaleza.

Al respecto, la ministra manifestó que el procedimiento no tenía autorización alguna de parte de la cartera, autoridad competente en este caso, en vista de que el Fuerte San Sebastián del Pastelillo fue declarado como Bien de Interés Cultural del ámbito Nacional. Por ello, “el Ministerio seguirá adelantando el trámite administrativo y sancionatorio al que haya lugar por las intervenciones, esto no se omitirá por el hecho de que el Club pague la restauración. Estamos en indagación preliminar, esto tendrá el debido proceso y la etapa probatoria para decidir el tipo de sanción”, expresó.

¿Por qué la intervención?

En declaraciones al diario El Universal - Colprensa, Ileana Stevenson, gerente del Club de la Pesca, explicó que los trabajos sobre la fachada del fuerte forman parte de un plan de mantenimiento periódico para preservar zonas con pañetes y pintura, previamente restaurados. “No es cierto que se esté pretendiendo cambiar el color original del Fuerte. Por el contrario, lo que algunos percibieron como una pintura con acabado blanco, en realidad constituye una base de protección antihongos, aplicada como parte del proceso de revestimiento, previo a la pintura final. De hecho, la base blanca ya no está visible, pues fue recubierta en el proceso de revestimiento”, informó el club en un comunicado.

Asimismo, la entidad aclaró que la intervención estuvo acompañada por el arquitecto Alberto Samudio, con el fin de garantizar el proceso más adecuado de restitución del pañete a su estado original. Sin embargo, Samudio, especialista en restauración de monumentos y conjuntos monumentales del Instituto Hispánico de Madrid, le aseguró a EL COLOMBIANO que ha sido el restaurador del fuerte durante varios años, hasta hace casi dos, pero que no acompañó directamente este proceso.

“Cuando nosotros hacemos restauraciones, entregamos informes mensuales detallados, con fotografías y dibujos. Después, hacemos un informe general y le dejamos al cliente un manual de mantenimiento que, entre otras cosas, explica cómo quitar los hongos que producen la costra negra. Lo que habría sucedido en este caso es que el contratista no entendió bien e implementaron el procedimiento equivocado, pues aplicaron estuco plástico y una pintura común y corriente”, indicó el experto.

Además, Samudio señaló que sí es necesario eliminar los hongos que producen costra negra en la entrada del fuerte y la garita, pues estos “se van comiendo la piedra y la van erosionando, hasta dañarla”. Aun así, fue enfático en decir que hubiese bastado con usar uno de los dos procedimientos adecuados que existen para este objetivo. El primero es un lavado manual con jabón neutro y un cepillo de cerdas finas de plástico; el segundo, muy usado últimamente en Europa, es proyectar vapor, a muy baja presión, por medio de pistolas especiales, con carbonato de sodio, abrasivo de bajo impacto que no daña la superficie que se debe cuidar, pero que quita la costra negra.

Según el arquitecto, es posible revertir el proceso que se hizo en el Fuerte, pero debe hacerse con total precaución, la observación y el liderazgo de un especialista y los procesos técnicos apropiados. Indicó que en Cartagena han tenido experiencias similares: “Por ejemplo, a la fachada del antiguo Club Cartagena le quitaron capas de pintura muy adheridas a la superficie con el chorrito de vapor y es increíble cómo van desapareciendo una a una las capas sin causar daño en la superficie original”.

Al respecto, Juan Luis Isaza, arquitecto experto en patrimonio, aclaró que, al ser Bien de Interés Cultural del ámbito Nacional, el Fuerte cuenta con “la máxima protección nacional posible”, a lo que se suma que forma parte de un sitio inscrito en la lista de patrimonio mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), por lo cual cualquier intervención debe tener, obligatoriamente, autorización previa de MinCultura.

Por otro lado, para el arquitecto, este caso se hizo más visible que otros similares porque, probablemente, representa una mayor apropiación social como patrimonio. “Es posible que, para una mayoría de los colombianos, las fortificaciones de Cartagena son relevantes, importantes y queridas; por eso, las alarmas se prenden en torno a lo que debe y no debe hacerse en ese lugar”, expresó.

Samudio concluyó que esto se debe también a que en el patrimonio de Cartagena, como en el de otros lugares, está representada la identidad del país y sus monumentos e inmuebles dan fe de lo que fueron las distintas épocas. En el caso de la ciudad amurallada, estas estructuras hablan de batallas, dificultades, luchas, libertad e independencia

El empleo que buscas
está a un clic

Nuestros portales

Club intelecto

Club intelecto
Las más leídas

Te recomendamos

Utilidad para la vida

Regístrate al newsletter

PROCESANDO TU SOLICITUD