No hubo conciliación entre el presidente de la República, Gustavo Petro, y el exmandatario Andrés Pastrana, en medio de la demanda instaurada por injuria y calumnia por un cruce de señalamientos a través de redes sociales, ocurrido los primeros días de diciembre de 2023.
El desenlace era previsible, teniendo en cuenta que antes del inicio de la audiencia el presidente Petro ya había anunciado que “la indemnización por perjuicios morales que reclama será destinada a una fundación con un fin social”.
Pastrana, por su parte, llegó acompañado de su abogado Julián Quintana y dio declaraciones a los medios de comunicación. “Aquí lo que está en juego es la libertad de pensamiento, es la libertad de opinión, es la libertad de hacer oposición”, argumentó el exmandatario en su arribo.
A la salida del encuentro, Pastrana nuevamente dio declaraciones, pero esta vez para manifestar su frustración porque el presidente Petro no habría aceptado la propuesta de hacer un debate público sobre los temas que los tienen enfrentados a ellos dos.
“Que en vez de debatir en los tribunales, hiciéramos un debate público en televisión, sobre el favorecimiento de su gobierno a grupos criminales y sobre la financiación de su campaña por personas al margen de la ley. Serán los ciudadanos los que consideren si el gobierno de Petro le da prebendas a los criminales o no, ellos serán los que estimen si se favorece a los narcotraficantes”, dijo el exmandatario.
Según Pastrana, con ese tipo de debates es como la libertad de expresión, de opinión y de oposición dejan de ser letra muerta en el papel. “Es ante los ciudadanos y no ante los jueces como se debate en la política”, agregó Pastrana. Por lo que el proceso de demanda por injuria y calumnia continúa.
Antes, Petro había publicado un comunicado de prensa en el que puntualizó que acudía a la Fiscalía para defender la honra y buen nombre de su gobierno.
“Ser presidente tiene un periodo fijo, pero ser ciudadano y demócrata es imperecedero, aun a riesgo de nuestra propia vida. Creo y defiendo las instituciones del país que me otorgó el privilegio de dirigirlas y acudo en busca de justicia porque nadie puede estar por encima de la ley”, señaló en el texto haciendo referencia indirecta a Pastrana.
El mandatario de los colombianos, además, señaló que respetaba las diferencias como demócrata, “pero no respondo a la violencia del lenguaje, reservado para quienes quieren lucrarse del poder pasajero, sin más ideas que la agresión verbal”.
Ambos habían llegado puntuales para la cita programada a las 10 de la mañana.
El encuentro, que los puso cara a cara, hace parte del proceso legal iniciado después de que el presidente Petro, a través de su abogado Mauricio Pava, radicara una denuncia formal contra Pastrana por injuria y calumnia.
Horas antes, el abogado defensor de Pastrana, Julián Quintana - el ex subdirector del CTI a quien la Fiscalía investigó en el pasado por supuestos actos de corrupción judicial - señaló que como abogado del expresidente “esperamos (que Petro) que asista puntualmente “ y “demostraremos que este gobierno quiere judicializar a sus opositores para silenciarlos. No lo lograrán”.
En el documento dirigido directamente al fiscal general, Francisco Barbosa, el actual mandatario Petro indicó que el expresidente Pastrana lo había acusado a él y a su gobierno de estar aliados con criminales y narcotraficantes.
“Pastrana Arango me acusa a mí y al Gobierno Nacional de estar aliados con narcotraficantes y criminales, una afirmación que hizo en una publicación en la red social X el 28 de noviembre de 2023. En esta, él declaró: Su campaña y su presidencia @petrogustavo no han sido otra cosa que la fusión del gobierno con el narcotráfico bajo el velo de una farsa denominada paz total”, argumentó Petro en la denuncia radicada.
Además, calificó las acusaciones de Pastrana de ser “completamente falsas”, que carecían de verdad y no reflejaban la realidad de su administración y los principios que la guían.
Los señalamientos los hizo Pastrana en respuesta y defensa a unos comentarios públicos que había hecho el presidente días antes por los vínculos que encontraron las autoridades entre algunos miembros de las Fuerzas Armadas y grupos de narcotraficantes.
La pelea se calentó más cuando el 11 de diciembre, también a través de la red social X, Pastrana respondió que no se iba a callar por las intimidaciones del presidente.
“Gustavo Petro pretende acallar tiránicamente mi ejercicio de la oposición instaurando el Delito de Opinión mediante el acoso judicial.
Ya su régimen amenaza con 15 años de cárcel a quienes se atrevan a manifestarse contra sus pactos con el narcotráfico”, escribió, dando a entender que se ratificaba en sus afirmaciones iniciales.
A pesar del intento de la Fiscalía al abrir un espacio para conciliar, y como lo confirmó el expresidente Pastrana, el proceso sigue.