x

Pico y Placa Medellín

viernes

0 y 6 

0 y 6

Pico y Placa Medellín

jueves

1 y 7 

1 y 7

Pico y Placa Medellín

miercoles

5 y 9 

5 y 9

Pico y Placa Medellín

martes

2 y 8  

2 y 8

Pico y Placa Medellín

domingo

no

no

Pico y Placa Medellín

sabado

no

no

Pico y Placa Medellín

lunes

3 y 4  

3 y 4

language COL arrow_drop_down

La larga ruta que le espera al Magdalena en la Unesco

Le contamos qué viene para la iniciativa de la U. Nacional y la Procuraduría, que busca que el río renazca mediante su declaratoria como patrimonio.

  • Desde las piraguas de los indígenas, pasando por los enormes champanes y los barcos de vapor, el río Magdalena fue durante siglos una ruta fundamental para la movilización de pasajeros y carga. Buscan devolverle su navegabilidad. FOTO jUAN aNTONIO sÁNCHEZ
    Desde las piraguas de los indígenas, pasando por los enormes champanes y los barcos de vapor, el río Magdalena fue durante siglos una ruta fundamental para la movilización de pasajeros y carga. Buscan devolverle su navegabilidad. FOTO jUAN aNTONIO sÁNCHEZ
28 de septiembre de 2020
bookmark

El río Magdalena recorre 1.550 kilómetros, desde su nacimiento en el Macizo colombiano, hasta su desembocadura, en Bocas de Ceniza.

A su paso influencia la vida, en mayor o menor medida, de más de 32 millones de personas. Según Cormagdalena, en los 728 municipios que recorre se asienta el 80% de la población del país.

En una de la exposiciones más completas sobre el Río, presentada en el Museo Nacional hace doce años, el investigador Germán Ferro expresó que “al describir y reflexionar sobre la historia y la memoria de la nación colombiana contenida a través de sus íconos, no habría tal vez ninguno que superase la presencia inequívoca del río Magdalena: eje organizador y paso obligado de nuestra historia”.

Pero ese es el mismo río sobre el que el procurador Fernando Carrillo, en abril de 2019, dijo que se convirtió en vergüenza nacional ante el mundo por ser uno de los 15 grandes ríos del planeta que más desechos plásticos arroja sobre los océanos. Dicho sea de paso, la contaminación es apenas una de las amenazas que atentan contra el afluente.

El pasado 16 de septiembre, la Procuraduría anunció su apoyo a la Universidad Nacional en su cruzada para que el Magdalena sea incluido como patrimonio mundial de la Unesco. Pero expertos consultados por EL COLOMBIANO advierten que el proceso no será sencillo, pues, hasta ahora, la gestión de las instancias encargadas de proteger el afluente deja varios vacíos.

Los pasos para lograrlo

Colombia es el único país en el mundo que ha declarado seis ríos como sujetos de derecho, es decir, beneficiarios de protección jurídica, lo cual, según explica el profesor Gonzalo Duque Escobar, uno de los gestores del proyecto desde la Facultad de Administración de la Nacional sede Manizales, se convierte en punto de partida para esta iniciativa.

Sin embargo, esta es una propuesta mucho más ambiciosa: “Hasta ahora se le han reconocido derechos a ecosistemas, pero lo que buscamos va más allá, pues si entendemos el territorio como una construcción social e histórica entonces este debe ser sujeto de derechos bioculturales”.

Si así lo determina la justicia colombiana, el siguiente paso será convencer a la Unesco de que el desarrollo de Colombia, tal como ha sido, es indisoluble con la existencia del río Magdalena.

Esto demandará una ardua tarea, conforme explicó el director del centro cultural del Banco de la República en Honda, Ángel Eduardo Moreno, pues se deberá construir un “expediente para recoger todo el tema del acervo patrimonial, cultural y social del río y de los pueblos ribereños”.

Lograrlo requerirá tiempo y, conforme recalcó la Procuraduría, de una amplia participación del Estado. Y deberá incluir instancias de participación de centenares de comunidades, acuerdos de voluntad, capacitación y conciliación en temas patrimoniales.

Esto conllevará también un proceso minucioso para determinar cuáles serían las zonas a declarar.

A modo de referencia, el proceso para convertir el Paisaje Cafetero como Patrimonio de la Humanidad llevó una década, e involucra a 47 municipios de Risaralda, Quindío y Valle. Esto evidencia que antes de ver hecho realidad el proyecto del Magdalena deban pasar varios años.

¿De qué servirá alcanzarlo?

El procurador Fernando Carrillo ha dicho públicamente que es urgente atender el deterioro del río, pues buena parte de la crisis ambiental que sufre el país se relaciona con la falta de ordenamiento social, ambiental y agrológico que ha tenido el río Magdalena históricamente.

“Es prioritario valorar y reconocer el papel que cumplen los ecosistemas estratégicos en la consolidación de una sociedad justa, resiliente y sostenible”, destacó el organismo.

Obtener la declaratoria implica que el Estado deba honrar unos compromisos con estrecha veeduría internacional, acceso a recursos de fondos de cooperación y asistencia técnica para la preservación y reparación de zonas declaradas en caso de daños graves.

Esto, apunta el profesor Duque, ayudaría a combatir todo tipo de impactos que suceden actualmente en los ecosistemas de influencia del río, como “la pérdida de las casi 12 millones de hectáreas de guadua, de las cuales solo quedan 50.000; la desaparición de una cuarta parte de los bosques de niebla de los que se surten acueductos de la población andina, entre otros”.

Mejor dicho, permitiría recuperar el río que dio vida a la cumbia y que inspiró historias de García Márquez. El que alimentó y transportó a indígenas y comunidades ribereñas desde tiempos milenarios y no el que conforma vergonzosas listas de afluentes contaminados del mundo.

5
reservas de la Biósfera tiene el país declaradas por la Unesco.
257.440
km es el tamaño de su cuenca; equivale al 23% de la superficie total de Colombia.
El empleo que buscas
está a un clic
Las más leídas

Te recomendamos

Utilidad para la vida

Regístrate al newsletter

PROCESANDO TU SOLICITUD