El presidente Gustavo Petro se pronunció frente al reclamo que elevó el senador Jota Pe Hernández (Alianza Verde), quien denunció que el Gobierno invierte más de $30 millones en alimentación para la Casa de Nariño. Entre ese rubro, alegó, se encuentran quesos por más de $4 millones. Ante ello, el mandatario dijo no ser glotón y aseguró que es “parco en el comer”.
Previamente, durante la plenaria del Senado, Hernández señaló que, cada tres meses, el Ejecutivo destina millonarios recursos para alimentación y entre los productos sobresalen, además de quesos, gaseosas, salchichas, jugos, enlatados, harinas, galletas y empanadas.
Lo anterior, tras elevar un derecho de petición al Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre) frente a los alimentos que consume el jefe de Estado. “Es cinismo de estos izquierdistas mentirosos que están es agarrando la platica de los colombianos por todo lado”, alegó el congresista.
En respuesta, ante un video divulgado por el también congresista Miguel Polo Polo en el que se observa a Petro comiendo un sancocho con “mirada perdida”, Petro asumió las críticas con humor y confesó que detesta la leche y los productos lácteos. Asimismo, defendió la supuesta austeridad en la alimentación en la Casa de Nariño durante su gobierno.
En esa línea, señaló que con lo que se invierte en materia de alimentación comen alrededor de 40 personas “cotidianamente”, así como integrantes de delegaciones y reuniones.
“Ya que se interesan en mis gustos culinarios confieso: detesto la leche y los productos lácteos. Hago un buen espagueti a la matriciana, y de los $30 millones que habló tan profundamente el otro senador de la extrema derecha, comen 40 personas cotidianamente, fuera de las personas que vienen en delegaciones, visitas y reuniones que se hacen. De todas maneras, menos que en los tres últimos gobiernos. No soy glotón, soy parco en el comer y me encanta el sancocho y ese me encantó”, manifestó el jefe de Estado.
Según la información revelada por el Dapre, fueron exactamente $30’390.452 los que se destinaron entre marzo y junio para la comida de las casas del presidente y de la vicepresidenta Francia Márquez. De ese total, se destinaron $3’507.962 en gaseosas, $2’643.651 en productos de panadería y pastelería, y $2’420.697 en procesados.