En el Centro de Servicios Judiciales de Paloquemao, la defensa de Jonathan Vega, presunto agresor con ácido de Natalia Ponce de León, presentó una solicitud para que su cliente recupere su libertad por haberse cumplido los términos sin que haya una decisión en el caso.
El próximo 9 de agosto, un juez de control de garantías deberá decidir si Vega es dejado en libertad, o si continúa recluido en la cárcel La Picota de Bogotá, mientras se sigue su juicio por los hechos ocurridos en 2014, en la carrera 23 con calle 122 del barrio Santa Bárbara, al norte de la capital del país.
En los próximos días, la Fiscalía hará la petición formal ante el Juzgado 37 de Conocimiento para que el presunto agresor de Ponce de León sea condenado por el delito de tentativa de homicidio, mientras que la defensa de Vega expondrá los argumentos finales para que su cliente sea declarado inimputable.
La defensa de Vega ha argumentado en el juicio que el procesado sufre de un cuadro de esquizofrenia, por lo que no podría responder por el ataque contra Natalia Ponce, mientras que la Fiscalía asegura que el presunto agresor goza de plenitud de sus capacidades mentales, toda vez que supo ordenar en el tiempo el plan, compró el ácido con anticipación, además, se hizo pasar por otra persona para que ella saliera de su casa para luego agredirla.
La Fiscalía cuenta con dictámenes médicos y psiquiátricos, vídeos obtenidos de las cámaras de seguridad de los lugares por donde transitó minutos antes y después del ataque el agresor, así como el testimonio de la víctima.