En el sexto día de la novena de aguinaldos el turno en este viaje por Antioquia es para la región atravesada por el río Grande de la Magdalena y sus riquezas.
Ubicada en un extenso valle formado por las cordilleras central y oriental, la subregión del Magdalena Medio antioqueño es el pedazo del departamento más cercano al centro de Colombia y durante siglos ha sido la puerta de entrada al río Magdalena, el más grande del país y hasta el siglo XX el corredor más importante para la entrada y salida de personas y mercancías.
Fue precisamente por esta posición privilegia que desde finales del siglo XIX esta subregión fue escogida para ser atravesada por el Ferrocarril de Antioquia, el cordón umbilical que conectó a Medellín no solo con el resto del país, sino con el mundo entero.
Lea también: Día 2 de la novena: La diversidad del Bajo Cauca y su “júbilo inmenso”
Por cuenta de esta empresa, antiguos puntos como el famoso “Remolino Grande”, ubicado por el geógrafo alemán Alexander Von Humboldt en 1801, terminó convirtiéndose después en el punto escogido para construir la última estación del tren.
Fue en 1875, cuando las obras de la vía de hierro arrancaron (tardarían medio siglo en completarse), que este puerto seco y fluvial fue bautizado en honor al general Pedro Justo Berrío, una de las figuras determinantes para que el primer tren terminara llegando a Medellín en 1914.
La subregión del Magdalena Medio está compuesta por seis municipios, en los que la pesca sigue siendo una de las actividades más importantes. Según el instituto Humboldt, la cuenca del río principal del país tiene 233 especies de peces de agua dulce, siendo la más rica de Colombia.
Le puede interesar: Día 4 de la Novena: “Desaparezcamos a nuestros propios ojos” en el Nordeste y su inmensidad de montañas y ríos
En su sexto día, dice la novena de aguinaldos: “Ni la situación de la Virgen Santísima ni la necesidad en que estaba José del trabajo diario que les aseguraba la subsistencia, pudo eximirles de este largo y penoso viaje”.
Sea esta una ocasión para rendir homenaje no solo al periplo de la sagrada familia en su camino Belén, sino de aquel mismo trabajo diario que engrandece al Magdalena Medio, una tierra no solo rica por su historia y su posición privilegiada dentro de Antioquia, sino también por sus grandes obras de ingeniería, faenas de pesca, hatos ganaderos y campos en los que se cultiva el alimento de la región.
