Las lluvias de los últimos días en el Valle de Aburrá y otras zonas de Antioquia han caído como un respiro para muchos habitantes tras los calores, a veces extremos, que primaron los primeros meses del año, influenciados por el fenómeno de El Niño.
Tras varios días de agua sobre varios municipios, las autoridades confirmaron este jueves 4 de abril el fin de la temporada de menos lluvias, que en el departamento causó 618 incendios forestales en cuatro meses y desabastecimiento de agua en 20 localidades.
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Aunque para muchos las recientes lluvias han sido una bendición, porque han evitado que comunidades se queden sin agua, la nueva situación climática que está empezando requiere atención y preparación de los comités municipales de gestión del riesgo ante las posibles emergencias que se presentarán.
La oficialización del inicio de la primera temporada de lluvias de este año la hizo Carlos Ríos, director del Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Antioquia (Dagran), quien afirmó que la proyección es que esta época lluviosa se extienda hasta mayo próximo.
El funcionario sostuvo que, según información del Ideam, en esta primera temporada de lluvias se esperan incrementos entre el 10% y el 30% respecto a la climatología habitual. Es por ello que no se trata solo de tener el paraguas a la mano y no olvidarlo al salir de casa, sino que también es necesario que las autoridades municipales estén al día con los planes para mitigar y disminuir el riesgo de desastres por esta época.
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Esto, porque durante esta temporada es muy probable que ocurran avenidas torrenciales, crecientes súbitas, inundaciones, movimientos en masa, vendavales y tormentas eléctricas. No obstante, eso no significa que se presenten días secos de aquí a mayo.
“Desde el Dagran nos venimos preparando desde hace días para la temporada de lluvias con el Sistema de Alerta y Monitoreo de Antioquia, SAMA, para conocer y monitorear los ríos y quebradas, también maquinaria amarilla para realizar obras de mitigación; apoyo helicoportado y ayudas humanitarias”, señaló el director.
Además, explicó que se activó la asistencia técnica a los 125 municipios del departamento, para que tengan la capacitación correcta para hacer frente a este tipo de emergencias.
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Ante este panorama, desde el Dagran también hicieron recomendaciones a las autoridades municipales y a los ciudadanos, con el fin de que estén preparados ante cualquier eventualidad por causa del invierno.
Entre las acciones que pueden implementar las personas están:
- Asegure bien los techos, tejas y láminas de zinc y en general los objetos que podrían ser arrastrados por la fuerza del viento.
- No arroje basuras, ya que esto podría obstruir el sistema de alcantarillado y provocar inundaciones. Tampoco es conveniente ubicarse o asentarse en zonas de riesgo de deslizamiento o inundación.
- Vigile los niveles de los ríos y quebradas que queden cerca de su residencia. Si ve que aumenta o hay represamientos, comuníquese con las autoridades competentes lo antes posible.
- No se exponga en campos abiertos mientras se presenten tormentas eléctricas ni se acerque a lo que puede actuar como pararrayos: árboles, vallas metálicas, postes de energía, alambres de tendero, etc.
- Limpie los techos, canoas y bajantes para evitar inundaciones en las viviendas. Es importante que haga mantenimiento de las cubiertas, goteras y fallas estructurales.
- Tenga precaución. Si llueve durante paseos a ríos o quebradas y observa algún cambio en el cauce o sonidos fuertes, lo mejor es que se aleje, ya que puede presentarse una creciente súbita por incremento de las lluvias.
