Una denuncia ciudadana condujo a la Policía y a funcionarios de la Alcaldía de Guarne hasta una casa en la vereda La Clara, donde se encontraron con la dolorosa escena de un perro muerto y otros once en las condiciones más deplorables posibles.
Andrés Londoño, secretario de Productividad y Medio Ambiente de Guarne, manifestó que fue tan grave el caso de maltrato que evidenciaron que inmediatamente la policía adelantó la captura de la mujer responsable del lugar. “Ellos tenían malnutrición y además de ellos estaban enfermos, presentaban diarrea y vómito y en este lugar realizamos una captura por esta mala tenencia de los perros. Lamentablemente en el lugar encontramos uno de los perros muertos. Estos animales llegan al albergue municipal donde les daremos amor y cariño, los recuperaremos porque tenían condición corporal muy baja”, confirmó.
La mujer fue sindicada del delito de maltrato animal y quedó a disposición del Grupo Gelma de la Fiscalía.
Pero la historia de los perros que alcanzaron a ser rescatados no termina con el operativo que les salvó la vida. Ahora la alcaldía emprendió una campaña para recuperar a estos animales maltratados y por ello le pidió a la ciudadanía que, una vez superen la difícil recuperación física, médica y de comportamiento, las personas se acerquen y adopten a cada perro y así finalmente tengan una verdadera segunda oportunidad.
Guarne, según autoridades y reportes frecuentes, es uno de los municipios más problemáticos en cuanto a maltrato animal, no solo en casos de maltrato individual a mascotas y contra la fauna silvestre sino por la presencia masiva de criaderos de perros de raza, varios de ellos irregulares, que en función de comercializar cachorros de raza incurren en todo tipo de malas prácticas.
Paradójicamente, la presencia de albergues también es uno de los factores que facilitan el aumento de casos de maltrato, pues muchos de estos lugares, a pesar de las buenas intenciones de sus responsables, terminan causándoles problemas a los animales rescatados por la dificultad para alimentarlos y atenderlos médicamente. En 2022, por ejemplo, las autoridades acabaron con un albergue en la vereda Batea Seca, pues cuando llegaron al lugar encontraron que la mayoría de los 140 perros rescatados se encontraban agonizando o en grave estado de salud por malnutrición severa y múltiples enfermedades no atendidas.
En cuanto a la mujer capturada, su caso podría seguir un curso similar al de otra mujer imputada justamente esta semana en Medellín, por uno de los peores casos de maltrato conocidos en la capital antioqueña en los últimos años. La judicializada fue encontrada en una casa en la que mantenía en graves condiciones a 55 perros de varias razas, la mayoría con patologías severas en la piel, en los ojos y en el sistema respiratorio.
La Ley 1774 del 6 de enero de 2016 que se refiere al “respeto, solidaridad, compasión, ética, justicia, cuidado, prevención del sufrimiento, en la erradicación del cautiverio y el abandono”, establece penas de cárcel que podrían ir de los 12 a los 36 meses y una inhabilidad para ocupar cargo profesional que implique el contacto con animales.
Las autoridades lanzaron nuevamente el llamado que nunca estará de más: adoptar es el acto más responsable para cualquier persona que realmente se precie de proteger y respetar a los animales domésticos.
También recordaron los mecanismos a través de los cuales la ciudadanía puede denunciar casos de maltrato animal: se puede contactar con la Fiscalía a través de la línea nacional 122 o acudir a la sede más cercana. También se puede ingresar al sitio web de la Fiscalía y diligenciar el formulario correspondiente para presentar la denuncia.
Para llamar a la policía a reportar un caso es posible contactarlos a través de la línea 123. La opción es acudir al CAI más cercano y solicitar la ayuda pertinente.
