La avenida Regional, esa misma que enlaza con la vía Paralela de Medellín, está a punto de perder parte de sus calzadas por cuenta de una socavación ocasionada por el río Medellín, la cual está a dos metros de llevarse esta vía.
Así lo denunció la Alcaldía de Bello, a través de sus secretarías de Gestión del Riesgo y Obras Públicas, que luego de hacer una evaluación del terreno, a la altura de los talleres del Metro de Medellín, encontraron con que el río ya se llevó parte de la tierra y, si no hay una pronta intervención, lo continuará haciendo hasta que agriete la vía y la haga intransitable, al menos en el sentido sur-norte.
Wber Zapata, director de Gestión del Riesgo de Bello, expresó que “el terreno ha cedido y la socavación se encuentra a solo dos metros de la vía principal. En la zona afectada se evidencia erosión del talud y desprendimiento de las placas de concreto que conforman la canalización del río, a lo que se suma el desvío de la corriente hacia la ribera izquierda, por acumulación de sedimentos”.
Para evitar que se llegue al peor escenario y que los cerca de 60.000 vehículos diarios que transitan por esta vía deban ser desviados, incrementando el colapso vehicular en el norte metropolitano, la Alcaldía de Bello, en conjunto con el Área Metropolitana, iniciaron las gestiones con la Universidad Nacional para realizar los estudios técnicos y diseños técnicos.
Pero debido a que este proceso puede demorar varios meses y la situación es catalogada como urgente por las autoridades de Bello, se iniciará un proceso de dragado en un tramo de la zona afectada y así evitar que el principal afluente de la región siga socavando las zonas aledañas a esta vía, informó Zapata.
Adicionalmente, se le envió un oficio a la Gobernación de Antioquia, el Área Metropolitana del Valle de Aburrá, a la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, a la Agencia Nacional de Infraestructura y a Vinus S.A.S., concesionaria de esta vía, para agilizar las gestiones conjuntas para su mitigación y atención oportuna.
Por el momento, desde la Alcaldía de Bello no se han informado de cierres a la espera de que los trabajos de mitigación tengan efecto. No obstante, si la zona se sigue desmoronando hacia el río, se podría estar hablando de algunas restricciones en la movilidad.
Este inconveniente se suma a los ya registrados con el Metro de Medellín desde 2014 y los cuales están relacionados con la canalización del río Medellín hace 70 años, cuando se hizo este de forma recta, sin meandros, lo que ha hecho que se generen 84 puntos críticos en toda la corriente del afluente, los cuales se van agudizando dependiendo de la intensidad de la temporada de lluvias.
Mario Gil Montoya, ingeniero geólogo del Área Metropolitana, dijo en junio del año pasado que “anteriormente teníamos un río meándrico, y ahora tenemos un río recto por la misma construcción de la ciudad. Esto ha generado situaciones de riesgo en el río, puesto que al aumentar los caudales, se presentan mayores socavaciones y diversas inestabilidades”.
La afectación más reciente relacionada con el río Medellín o alguna de sus quebradas se registró el 16 de junio del año pasado, cuando una socavación en la quebrada La Caldera llevó a que durante una semana hubiera inconvenientes en la operación del metro desde la estación Caribe hacia el norte del Valle de Aburrá.
